¿Agua que desaparece? Suena extraño, pero no hace falta ser mago para poder hacerlo. Solo tienes que estar atento a este vídeo y tú también podrás hacer desaparecer agua con este sencillo experimento casero.
Qué necesitamos para este experimento con agua
Todo bastante a mano y fácil de conseguir. Básicamente lo que vamos a utilizar van a ser dos botellas, un vaso, agua, colorante (con un color es suficiente), un planto hondo y un pequeño trozo de corcho.
El proceso
El primer paso para llevar a cabo este experimento con agua es echar un poco de colorante en una botella. Luego un poco de agua, en bastante más cantidad que el colorante. Revolvemos hasta que los grumos que genera el colorante desaparezcan Después lo vertemos en el plato hondo. Colocamos el corcho en el medio del plato. Este se quedará flotando y a continuación ponemos el vaso bocabajo encima del corcho, por lo que este se queda aislado respecto al resto del agua con colorante que hay en el plato.
¿Qué ha pasado?
Al poner el vaso encima, este se queda lleno de aire, y al colocarlo sobre el corcho, dispersa el agua provocando que el corcho se quede en el fondo.
Por cierto, después de este experimento con agua casero, es de suponer que tirarás el corcho (que si le puede dar otro uso, mejor que mejor). ¿Sabes dónde lo hay que hacer? En el contenedor marrón (si fuera corcho blanco, en el amarillo). En este contenedor además deben depositarse los restos de comida, como pieles y restos de frutas y verduras crudas o cocinadas. También restos de carne cocinada, de pescados y mariscos, de pastas y arroces, cascaras de huevos, posos de café y té, bolsitas de infusiones, pan, palillos, hierbas y plantas, servilletas y papel de cocina usados, alpiste y restos de la huerta.
Y si te ha sobrado colorante, aquí tienes más experimentos donde lo puedes utilizar.
Probando otro experimento con corcho y agua
Aprovechando que has llegado hasta aquí, vamos a premiarte con otro experimento que puedes realizar con corcho y agua. Si pones un corcho (por ejemplo, de una botella de vino) en el agua, verás que en todo momento se dirige hacia un lado. Sin embargo, nunca lo verás en el centro. ¿Sabes por qué es?
Es una combinación de dos efectos: flotabilidad y adherencia. La flotabilidad levanta el corcho tanto como le resulta posible, hasta que desplaza su propio peso de agua (principio de Arquímedes). Como consecuencia de esto, el corcho buscará el punto más alto del nivel del agua. Debido a la adhesión entre las moléculas de agua y el vidrio, el nivel del agua es más alto en los bordes (el nivel del agua es cóncavo). Como resultado, el corcho se mueve hacia los lados. Si llenas el vaso hasta el borde, el nivel del agua se vuelve convexo (debido a la tensión superficial) y el corcho permanecerá en el medio.
Expande tu conocimiento científico con experimentos caseros
Como ya has podido comprobar en el experimento, objetos que tenemos a nuestro alrededor nos pueden ayudar a expandir nuestro conocimiento sobre ciencia. En este caso, tan solo hemos necesitado un poco de agua y un corcho para realizar dos experimentos que prueban leyes totalmente diferentes. Por ello, te invitamos a que aproveches la oportunidad para descubrir otros experimentos que te ayudaran a descubrir más sobre cuestiones de física o química que se producen a nuestro alrededor día tras día. ¿Te imaginas ahora crear un fuego invisible? ¿O conocer cómo funcionan las vibraciones de un fluido no newtoniano? Haz click en estos artículos y… ¡sigue expandiendo tu conocimiento científico!