10 inventos que cuidan del medio ambiente
Zapatillas impresas con tecnología 3D. Paneles solares accesibles. Huertos subterráneos. ¿Qué tienen estas tres ideas en común? Todos son inventos que cuidan del medio ambiente. ¿Suena a locura? Lo cierto es que no. De hecho, hay muchas empresas que están buscando maneras creativas de crear productos sostenibles. Hemos hablado en otras ocasiones sobre inventos que promueven el consumo responsable del agua. En esta ocasión te traemos 10 innovaciones revolucionarias que buscan el uso responsable recursos.
10 inventos para cuidar el medio ambiente
Una zapatilla fabricada que cuida el medio ambiente
Y no un plástico cualquiera, sino el que se obtiene tras retirar 72 toneladas de plástico acumulado en el océano. Se trata de un proyecto de Adidas y Parley for the Oceans, una iniciativa que reúne a creadores, artistas e innovadores para buscar soluciones que cuiden del medio ambiente. Sin duda, ésta es una de ellas: una suela fabricada con impresora 3D a partir de un material a base de plástico reciclado con desechos recuperados del mar. La idea se presentó en la cumbre sobre el cambio climático de París y tuvo muy buena acogida.
Bacterias que comen tóxicos
Parece ciencia ficción, pero no lo es: existen bacterias que transforman los tóxicos que ingieren y los transforman en un compuesto inocuo. El hallazgo es una investigación de la Universidad Autónoma de Barcelona, dirigida por Ernest Marco-Urrea, que logró cultivar esta bacteria en un laboratorio. Según sus análisis, estas bacterias solo viven en entornos contaminados porque se alimentan de ellos. Por eso, el lugar en el que empezaron a analizar muestras fue en el que fuera el más contaminado de Europa: el río Besós. Implementar las bases de este descubrimiento permitiría tratar acuíferos contaminados para eliminar las toxinas.
Paneles solares de pago por uso
La compañía keniata M-Kopa ofrece a los habitantes de Kenya, Uganda y Tanzania, la posibilidad de adquirir un kit de paneles solares que se pagan en función del consumo. Con un depósito de 35 dólares y una cuota diaria inferior a lo que pagan por el queroseno, M-Kopa instala paneles conectados a teléfonos móviles. Se paga por el servicio a través del micropago. Este invento que cuida el medio ambiente permite dar energía limpia y eliminar así el queroseno, altamente contaminante.
Agua en el desierto
Con este invento no haría falta soñar con oasis. La condensación del vapor de agua permite a una máquina producir cinco mil litros diarios en atmósferas con cuarenta grados centígrados y con una humedad en torno al diez por ciento. El proyecto, obra de un ingeniero frigorista de 75 años llamado Enrique Veiga, se llama “Aquaer”. Este invento que ayuda a cuidar del medio ambiente permite obtener agua potable en mitad del desierto con el gasto medio de una lavadora. Una idea que, sin duda, puede cambiar la vida de millones de personas.
Un sistema natural de depuración de aguas
Sedaqua obtuvo el Premio Innova Emprende en la edición 2015 de los Premios Innova otorgados por Fundación Aquae. Se trata de un sistema de depuración de aguas mediante humedales artificiales y digestión anaerobia. Este sistema es de fácil mantenimiento, muy bajo consumo de energía y totalmente ecológico, pues no precisa de productos químicos. Además, se integra totalmente en el paisaje, con lo que se elimina la imagen típica de las depuradoras de agua. Sedaqua es una spin-off de la Universidad de A Coruña y está dirigida por David de la Varga Calvo, cuya tesis doctoral puede leerse en la plataforma AquaeTesis de la web de Fundación Aquae.
Telas fabricadas con las hojas de las piñas para cuidar el medio ambiente
Josephine Baker se ponía faldas de plátanos, y ahora, cien años después, nos hacemos vestidos con hojas de piña. O, mejor dicho, con las fibras de las hojas de la piña, que no es tan vistoso pero es igualmente sostenible. El invento es idea de una española, Carmen Hijosa, que dirige una empresa londinense llamada Ananas Anam. Esta marca fabrica el llamado “Piñatex”, un tejido sostenible que, además, ha permitido relanzar la industria de la piña en las Filipinas, el lugar donde Hijosa tuvo la idea. Se elabora de manera natural, sin químicos ni fertilizantes y, como les gusta decir, “sin que ninguna piña haya sufrido daño alguno”.
Un sensor para controlar el agua
La musa de la poesía da nombre a un invento que cuida el medio ambiente. Se trata de un sensor que permite monitorizar el agua del hogar para conocer en qué momento y en qué zona se consume más. Además, Calliope detecta las fugas y envía un mensaje al usuario vía app para evitar el consumo excesivo de agua. El dispositivo se instala en el conducto principal y se controla mediante una aplicación de fácil manejo. Empezó a comercializarse a finales de 2016.
Un sanitario que recicla la orina
La Fundación Bill&Melinda Gates puso en marcha en 2011 el reto “Reinventa el sanitario”, un concurso internacional para financiar proyectos que dieran valor añadido a los sanitarios. En 2012, Seva Sustainable Sanitation ganó el primer premio, consistente en 100.000 dólares para desarrollar la idea: se trata de un sanitario que, mediante energía solar, recicla la orina y la convierte en agua desinfectada. El proyecto, nacido en el Instituto de Tecnología de California, se aplica ya en India.
Cajeros automáticos de agua
De hecho, el problema del agua potable es el mayor al que se enfrentan en la India. Piramal Sarvajar ha desarrollado cajeros automáticos que, en vez de dispensar dinero, dispensan agua. Se puede pagar con tarjeta o con monedas, y al estar conectados a la nube, permiten controlar en todo momento la calidad del agua. El sistema funciona, además, con energía solar y está disponible todas las horas del día.
Cuidar el medio ambiente con Huertos bajo el agua
La propuesta de GreenWave es cuanto menos original: desarrollar la figura del “granjero de los océanos” mediante la implantación de huertos bajo el agua. Estas granjas verticales permiten cultivar algas, vieiras y mejillones en cuerdas flotantes, de las que cuelgan los criaderos para las ostras. Este sistema absorbe cinco veces más carbono que los cultivos en tierra y son una manera de desarrollar ecosistemas biodiversos.