El agua, clave para un desarrollo sostenible
El agua y el desarrollo sostenible están vinculados desde que el 25 de septiembre de 2015 los líderes mundiales adoptaron unos objetivos globales con el fin de proteger el planeta, erradicar la pobreza y crear un planeta sostenible. La relación del agua con la vida está en el epicentro de la función del agua con el cumplimiento de estos objetivos. El plazo para alcanzarlos se estableció en quince años, para el 2030.
En síntesis, estos objetivos globales son desafíos ambientales, políticos y económicos que afectan a toda la sociedad, desde gobiernos e instituciones de toda índole hasta los ciudadanos. Abordan problemas del presente que condicionarán nuestra vida en el futuro.
Todos los objetivos se relacionan entre sí y se complementan. Son partes de un todo en conexión en el que el agua, además de estar representada en el ODS 6, es fundamental para la consecución del resto.
Relación del agua con los objetivos de desarrollo sostenible
- ODS 1: Fin de la pobreza. El agua y el buen saneamiento ayudan a las familias a unas mejores condiciones de vida y proporcionan un bienestar que es básico para contribuir a salir de la pobreza.
- ODS 2: Hambre cero. El agua es clave para la producción de alimentos en todas sus fases, por lo que es necesario su uso sostenible.
- ODS 3: Salud y bienestar. Un buen tratamiento del agua es sinónimo de salud. Reduce enfermedades transmitidas y producidas por la contaminación del agua.
- ODS 4: Educación de calidad. El agua y un buen saneamiento ayuda a reducir la abstención escolar en muchas zonas del planeta en las que los niños no acuden a la escuela por problemas relacionados con el agua y el saneamiento.
- ODS 5: Igualdad de género. Las mujeres y las niñas son las más perjudicadas por un acceso limitado al agua en algunas regiones del mundo. Por otro lado, la presencia de mujeres en la toma de decisiones en la gobernanza del agua es menor con respecto a los hombres.
- ODS 6: Agua limpia y saneamiento. Se trata del objetivo que vincula aún más estrechamente el agua y el desarrollo sostenible: es el ODS dedicado al agua de forma directa, pues se centra en el acceso al agua limpia y al saneamiento.
- ODS 7: Energía asequible y no contaminante. La producción de energía depende mucho del agua en todos los sectores y, a partir de ella, se están generando muchas alternativas de energías sostenibles.
- ODS 8: Trabajo decente y crecimiento económico. El acceso al agua y a un saneamiento adecuado mejora la vida de las personas y, por tanto, ayudan a una mejor salud y estabilidad para afrontar sus actividades laborales.
- ODS 9: Industria, innovación e infraestructuras. El agua puede ser materia prima para el sector industrial, para buscar nuevas formas innovadoras para la sociedad y para el desarrollo de infraestructuras.
- ODS 10: Reducción de las desigualdades. El agua y el saneamiento son claves para la inclusión social y la economía de los países más pobres. Así, un mejor acceso a este recurso rebaja las desigualdades y da oportunidades.
- ODS 11: Ciudades y comunidades sostenibles. Para una un desarrollo sostenible de las ciudades se requiere un acceso a agua bien tratada y a un saneamiento en perfectas condiciones.
- ODS 12: Producción y consumo responsables. Cualquier producto que consumimos, en su proceso de producción, ha necesitado agua. Saber qué consumimos y cómo ha sido realizado es esencial para una mayor sostenibilidad del planeta.
- ODS 13: Acción por el clima. El agua es un elemento clave para la adaptación y la mitigación del cambio climático, así como para la resiliencia de las personas y de los ecosistemas.
- ODS 14: Vida submarina. La relación del agua con la vida es absoluta. De hecho, para proteger los ecosistemas y hábitats marinos es necesario reducir la contaminación y luchar contra el calentamiento de los océanos.
- ODS 15: Vida de ecosistemas terrestres. Existe una gran relación entre el agua y la vida de los ecosistemas terrestres. Resalta la necesidad de cuidar los ecosistemas cercanos a los ríos y los humedales, de gran relevancia para el equilibrio de la biodiversidad y la vida del ser humano.
- ODS 16: Paz, justicia e instituciones sólidas. Las regiones y los países que comparten recursos hídricos deben colaborar para evitar conflictos por este recurso.
- ODS 17: Alianzas para logar los objetivos. La relación del agua y el desarrollo sostenible con todos los ODS convierte a este elemento en clave para su consecución y para fomentar alianzas y cooperación.