Yasmina Ferrer nos cuenta en esta entrega cómo afecta el cambio climático al ciclo del agua. Utilizaremos como punto de partida el informe final sobre el Estado Mundial del Clima de 2019 presentado por la Organización Meteorológica Mundial, que muestra que el calentamiento global de los océanos ha alcanzado niveles récord.
El hielo del Ártico se encuentra en mínimos históricos. Los fenómenos meteorológicos extremos vinculados al cambio climático y al ciclo del agua están teniendo un importante impacto en la seguridad alimentaria, la salud o las migraciones.
La UNESCO ha destacado que las alteraciones climáticas van a empeorar la situación de los países que ya viven a día de hoy estrés hídrico, además de generar problemas similares en áreas que todavía no se han visto gravemente afectadas. Aún estamos a tiempo de solucionar esta situación.
El cambio climático está afectando a procesos esenciales de muchas especies y organismos. Numerosas especies están en peligro de desaparecer. Y cada vez son más los problemas climatológicos y ambientales a los que el planeta entero debe hacer frente. Ante el avance de esta situación resulta esencial la movilización internacional en la lucha contra el calentamiento global.
Marcado por el cambio climático
¿Cómo afecta el cambio climático al ciclo del agua? Dicho de forma simple, el ciclo del agua consiste en el proceso a través del cual el agua proveniente de la tierra y el mar se evapora. y finalmente regresa al planeta en forma de lluvia y nieve.
El cambio climático está provocando que este ciclo se vuelva más intenso. Porque a medida que aumenta la temperatura del aire, cada vez se evapora más agua. Esta situación puede provocar tormentas de lluvia más intensas y causar problemas importantes como inundaciones extremas en las comunidades costeras de todo el mundo.
A continuación veremos cómo afecta el cambio climático a los dos procesos principales del ciclo del agua:
- Evaporación. El aire más cálido puede contener más humedad que el aire frío. Como resultado, en un mundo más cálido, el aire absorberá más agua de los océanos, lagos, suelo y plantas. Las condiciones más secas que deja este aire podrían afectar negativamente el suministro de agua potable y la agricultura. Por otro lado, el aire más cálido y húmedo también podría poner en peligro la vida de millones de personas. Son los llamados desplazados climáticos.
- Precipitación. Cuando todo ese aire extra cálido y húmedo se enfría, cae lluvia o nieve extra al suelo. Por lo tanto, un mundo más cálido conllevará lluvias mucho más intensas. Con el cambio de la temperatura del aire y los patrones de circulación del aire, el cambio climático también alterará los lugares donde lloverá Se espera que algunas áreas se vuelvan más secas mientras que otras experimentarán un aumento de las precipitaciones.
La estrecha unión entre agua y cambio climático
El agua y el cambio climático comparten una estrecha unión que es necesario conocer las soluciones que se plantean necesarias para minimizar los recursos hidrópicos. Sobre ello, debatimos con Yasmina Ferrer, técnico de Cooperación del Departamento del Fondo de Cooperación de Agua y Saneamiento de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), nos explica esa unión tan estrecha que mantienen el agua y el cambio climático y las medidas que existen para minimizar los riesgos hídricos.
Debemos ser consciente de la necesidad de construir un planeta más sostenible y de las limitaciones de los recursos naturales para lograrlo. En Fundación Aquae fomentamos la participación colectiva para combatir el cambio climático. Para ello, llevamos a cabo proyectos que contribuyen a este objetivo y al desarrollo de la economía circular. La iniciativa más importante sobre ello es Sembrando Oxígeno a través del cual se busca compensar la huella de carbono en el planeta.
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