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Desplazados climáticos, la migración invisible

Desde los años 70 se han duplicado los desplazamientos por causas climáticas y cada año hay alrededor de 20 millones de personas que se ven obligadas a abandonar sus hogares. ¿Qué se puede hacer para evitarlo? Hablamos con María Jesús Vega, portavoz de ACNUR en España, sobre desplazados climáticos.

¿Quiénes son los desplazados climáticos?

Los desplazados climáticos son aquellas personas que se encuentran fuera de sus hogares y de la zona en la que habitualmente viven debido al cambio climático o a desastres naturales, y que han debido realizar una migración forzada. También se les conoce como refugiados o emigrantes ambientales.

Debido a esta situación abandonan la región en la que residen para cruzar las fronteras de su país. Pero el cambio climático también puede ocasionar movimientos internos que afectan a las personas en sus propios países. Es más, la mayoría de los desplazamientos relacionados con desastres ambientales y los impactos del cambio climático son internos.

Por eso, frente a quienes emplean la expresión “refugiados climáticos”, ACNUR propone la de “desplazados climáticos” como la más correcta. Además, la denominación “refugiados climáticos” no está contemplada en el derecho internacional. Por lo tanto, no hay datos exactos sobre el número de personas que han abandonado sus hogares debido a las consecuencias del cambio climático.

¿Cómo afecta el cambio climático?

En ocasiones, la zona que asignan los gobiernos para poder ubicar un campo de refugiados ambientales está en regiones donde no hay agua; otras, en cambio, debido a las malas infraestructuras, tienen el riesgo de inundarse. Todo esto termina afectando a la población refugiada, que es objeto de múltiples desplazamientos. No solo por persecución o por guerras y conflictos, sino también por factores medioambientales.

El cambio climático afecta en mayor medida a las poblaciones con menos recursos, a las regiones en desarrollo o aquellas que sufren algún conflicto. Se calcula que el 84% de los desplazados climáticos o refugiados ambientales del mundo se encuentran en países en desarrollo.

En este contexto, a través del grupo sobre desplazamiento climático que se creó a raíz del Acuerdo de París, desde ACNUR se trabaja para que los gobiernos puedan adoptar legislaciones que les aporten protección. Al mismo tiempo, dan asistencia a los refugiados ambientales por el cambio climático.

El cuidado del medio ambiente

En esta entrevista, María Jesús Vega, portavoz de ACNUR para España, nos habla también sobre los proyectos de la organización en torno a las energías renovables y el respeto al medio ambiente: nos cuenta la situación  en un campo de refugiados de Azraq, en Jordania, uno de los más grandes del mundo, donde existe una central con placas fotovoltaicas que está abasteciendo de energía prácticamente a toda la población de campamentos; o la historia de cómo un grupo de refugiados en Egipto inició un trabajo de colaboración para limpiar de plásticos el Nilo.

Nuestro mayor reto ante los desplazados climáticos

En el año 1951 se aprobó la Convención de Ginebra como marco jurídico para los refugiados. Un refugiado ya no es sólo la persona que tiene que huir de un país con un regímenes políticos represivos o quienes escapan de conflictos armados. El cambio climático es un factor que actúa como catalizador estos movimientos migratorios.

La deforestación, el aumento desproporcionado de las emisiones de gases de efecto invernadero y el crecimiento acelerado de la población son algunas de las causas del cambio climático del cambio climático, que es el desafío por excelencia de nuestro tiempo y del que ya se pueden observar sus graves y variados efectos. Se trata de un factor que incrementa o exacerba otras tendencias que hay a nivel mundial. Como la migración hacia las ciudades, la urbanización, la inseguridad alimentaria y energética, los problemas para el acceso al agua…

Desde los años setenta se ha duplicado la probabilidad de desplazamientos por causas climáticas. Y cada año hay en torno a 20 millones de desplazados climáticos que se ven obligados a hacerlo por estas razones.


ACERCA DEL AUTOR

María Jesús Vega es portavoz y responsable de comunicación de ACNUR en España. Cursó estudios como Trabajadora Social en la Universidad Complutense de Madrid, ampliando sus conocimientos en esta materia en EE. UU. como becaria de la Comisión Fullbright. Lleva más de 25 años desarrollando su actividad profesional en el área de refugiados, donde comenzó trabajando en organizaciones como la Cruz Roja, el Comité Internacional de Rescate y ACNUR.