Los contaminantes orgánicos y, especialmente, los llamados contaminantes de preocupación emergente (CECs) tienen un enorme impacto en el medio ambiente. Por ejemplo, se encuentra los productos farmacéuticos, cuya presencia es baja en las aguas residuales, pero pueden provocar grandes daños a la flora y a la fauna y, por extensión, a la salud del ser humano. Por tanto, es necesario encontrar tratamientos que puedan degradar de manera eficiente su presencia de las aguas. A continuación abordamos la problemática de la contaminación en las aguas residuales y nos centramos en los principales procesos para el tratamiento de este tipo de aguas.
Un equipo de la Universidad Politécnica de Madrid lleva años trabajando en este sentido. A partir de un tratamiento de las aguas residuales a través de distintos procesos de oxidación avanzada basados en la generación de agentes oxidantes de materia orgánica contaminante. Dentro del proyecto, se ha trabajado para la degradación eficiente de los contaminantes de preocupación emergente.
María José Martín de Vidales, investigadora que ha participado en el trabajo, ha declarado que “este tipo de contaminantes presentan una elevada persistencia en las aguas residuales, ya que no pueden ser eliminados completamente por los tratamientos de aguas convencionales, y su presencia en el medio acuático, incluso en bajas concentraciones, puede generar problemas de salud de diversa índole (problemas en los sistemas hormonal y endocrino, diversos tipos de cáncer, resistencia bacteriana a los antibióticos, etc.)”.
Sobre los propósitos de este proyecto, Martín de Vidales ha concretado que uno de ellos “ha sido buscar una mayor superficie activa de catalizador por extrusión y su posterior impresión 3D, contando con una adecuada dispersión de TiO2 en un soporte de menor densidad que el agua, obteniendo así un fotocatalizador flotante accesible a la radiación UV y de elevada actividad en el tratamiento de aguas residuales contaminadas con CECs. La característica flotante del catalizador puede aumentar la eficiencia del proceso si el contaminante se encuentra principalmente en la superficie del agua”.
De esta manera, los fotocatalizadores que se obtuvieron mostraron una actividad mayor en comparación con una geometría plana -utilizada como punto de referencia-. Así, este ensayo realizado con éxito abre caminos al tratamiento de los CECs in situ. En este caso concreto, con el uso de fotocatalizadores flotantes y radiación solar como único reactivo. Un proceso que, además de efectivo, se presenta como muy económico, eficiente, de fácil implantación y medioambientalmente compatible.
El tratamiento de aguas residuales se trata básicamente de un conjunto muy variado de procesos físicos, químicos y biológicos con los cuales se consigue eliminar todos aquellos contaminantes presentes en el agua, para que el ser humano pueda hacer uso de ella. Existen tres tipo de procesos: