Las infraestructuras del agua en España, en riesgo por el cambio climático

Es necesario un plan de renovación sostenible de las infraestructuras del agua en España, uno de los países europeos más vulnerables a los efectos del cambio climático, con el objetivo de garantizar el acceso a agua potable, según un estudio pionero de Cátedra Aquae de Economía del Agua y la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento (AEAS).

Este ‘Análisis de las necesidades de inversión en renovación de las infraestructuras del ciclo urbano del agua’ señala que el impacto de los fallos en los servicios del ciclo urbano del agua se intensifica, provocado por fenómenos meteorológicos extremos cada vez más frecuentes por el cambio climático, así como al crecimiento y concentración de la población en áreas urbanas.

La vulnerabilidad de España ante el cambio climático se debe a que sufre de elevados niveles de estrés hídrico, el 20 % de su territorio ya puede considerarse desértico y en torno a un 80 % está en riesgo de desertificación.  Además, actividades muy importantes para la economía nacional, como la agricultura y el turismo, son intensivas en consumo de agua.

“En este escenario de cambio climático, este plan de renovación sostenible garantizaría un funcionamiento óptimo de estas infraestructuras, lo que minimizaría las pérdidas en la captación, almacenamiento, tratamiento y distribución del agua en nuestras urbes; mejoraría la calidad de los efluentes vertidos a los ecosistemas acuáticos; facilitaría una mayor reutilización del agua; y reduciría el gasto energético asociado a todos los procesos derivados del ciclo urbano del agua”, explica Amelia Pérez Zabaleta, directora de la Cátedra Aquae, impulsada por Fundación Aquae y la UNED.

En los últimos dos años, España ha sufrido sucesos climatológicos extremos como una fuerte sequía o episodios de gota fría en Alicante, Murcia y Cataluña, con importantes consecuencias sociales y económicas.

Según este estudio de Cátedra Aquae y AEAS -el primero que evalúa las necesidades de renovación de los activos asociados al ciclo urbano del agua en nuestras ciudades-, la inversión en infraestructuras del agua es un 80 % menos de lo que se necesita; con 585 millones de euros invertidos frente a los 2.200-3.800 millones de euros anuales estimados como necesarios.