Cátedra Aquae
Una guía para una mejor gestión de las inundaciones
La Iniciativa de Gobernanza del Agua, a la que pertenece Fundación Aquae, publica ‘Aplicación de los Principios de la OCDE sobre la Gobernanza del Agua en Inundaciones’, en el que ofrece una lista de verificación con más de 140 preguntas e indicadores para ayudar a gestionar mejor las inundaciones.
Después de la última reunión, desarrollada en Berlín el pasado mes de junio, de la Iniciativa de Gobernanza del Agua (WGI por sus siglas en inglés), de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), se ha publicado el informe ‘Aplicación de los Principios de la OCDE sobre la Gobernanza del Agua en Inundaciones’. Fundación Aquae forma parte de esta red mundial de expertos del agua.
Un informe para guiar a gobiernos y otros agentes
Con este informe, la OCDE busca ofrecer una guía a los gobiernos y a todos los agentes implicados en los diseños, la implementación y la evaluación para la ejecución de políticas, prácticas y proyectos relacionados con la gestión de las inundaciones.
De este modo, el informe desarrolla una lista de verificación alrededor de 36 indicadores y una lista de más de 100 preguntas que componen el Marco de Indicadores de Gobernanza del Agua de la OCDE y las Recomendaciones de la OCDE sobre la Gobernanza de Riesgos Críticos.
Para cada principio se evalúa el qué -el estado de los marcos de políticas de gobernanza de inundaciones-, quién -la existencia y funcionamiento de las instituciones-, cómo -las herramientas de gobernanza vigentes- y, por último, el impacto de las actuales políticas.
Unas preguntas de autoevaluación podrán servir a los responsables de la gestión de inundaciones a comprender mejor la manera en la que funcionan los sistemas de gobernanza de inundaciones a nivel local, de cuenca y nacional, de tal manera que puedan estar más preparados a la hora de tomar decisiones.
Mariola Urrea, presidenta del Consejo de Estrategia de Fundación Aquae, aclara, que «las inundaciones, el desastre natural más común que sufre nuestro planeta, son cada vez más frecuentes y extremas como consecuencia de la crisis climática, el crecimiento demográfico y la urbanización. Actualmente hay 1.200 millones de personas en riesgo de sufrir inundaciones. Vale la pena tener presente cómo las inundaciones provocan, en la mayoría de los casos, graves daños sociales, económicos y ambientales. China, India y Vietnam son los países que cuentan con mayor riesgo potencial de inundaciones urbanas».
Se estima que el daño anual por inundaciones en el mundo supera los 90.000 millones de euros, una cifra que en España se sitúa en los 800 millones de euros, según el Consorcio de Compensación de Seguros y el Instituto Geológico y Minero de España. En 2050, se prevé que sean 1.600 millones (20% de la población mundial) las personas que se encuentren en riesgo de sufrir inundaciones.
27 casos de estudio
El informe de la WGI aplica los 12 Principios de la OCDE para analizar 27 casos de estudio de gestión de inundaciones en países miembros y no miembros de la OCDE. Entre ellos se encuentran dos casos españoles, a partir de los que se extraerán buenas prácticas y un análisis de los desafíos clave. Por un lado, la restauración hidrológica para minimizar el riesgo de inundación en la confluencia de los ríos Arga y Aragón (Navarra); por otro lado, la gestión de las inundaciones en Granada.
Para gestionar las inundaciones adecuadamente, según la WGI, se debe poner el foco en las infraestructuras “híbridas” (“grises” como diques, presas o terraplenes; y “verdes” como colectores de lluvias, estanques de retención o parques urbanos inundables) y en la gobernanza (planificación adecuada del uso del agua y la tierra).
Después de analizar estos 27 casos, la WGI realiza las siguientes recomendaciones:
- realizar autoevaluaciones de la gestión de las inundaciones para identificar qué funciona, qué no funciona, qué debe mejorarse y quién puede hacer qué;
- promover el enfoque de la gobernanza multinivel.
Por otro lado, la Iniciativa de Gobernanza del Agua anima a los gobiernos a que:
- traten la crisis climática y la gestión de las inundaciones como ámbitos de política complementarios.
- promuevan la participación de todas las partes interesadas en la elaboración de políticas, estrategias y planes integrales a largo plazo dentro de un enfoque integrado de cuencas.
- diversifiquen sus fuentes de financiación y fomenten los pagos por los servicios de los ecosistemas, la cooperación internacional para el desarrollo, los planes de cofinanciación y unos sistemas de seguros sólidos; y mejorar la coordinación entre los diferentes niveles de gobierno (local, regional, de cuenca y nacional).