Acuífero 23, uno de los más grandes de España
El acuífero 23, o acuífero de La Mancha Occidental, recorre 3 provincias, Ciudad Real, Albacete y Cuenca. Los Ojos del Guadiana son salidas naturales del agua que se acumula en el mismo, siendo otra salida natural del mismo las Tablas. En los años 70 se empezó su sobreexplotación y estas extensiones naturales del mismo llegaron a desaparecer. En el año 1987 se declaró sobreexplotado. Los motivos del declive en el mismo son varios.
La presa de Peñarroya en el alto Guadiana corto el suministro de agua. Las extracciones por pozos igualmente sustrajeron gran cantidad de recursos y por último, las escasas lluvias de los últimos años han contribuido a esta sequía.
En los años 50 para contribuir al desarrollo económico de la región se fomentó el cultivo de regadío en la zona. Este desarrollo se hizo sin tener en consideración la sostenibilidad de la zona ni aspectos climáticos. Este desarrollo generó un nuevo desarrollo económico en la región pero a cambio de prácticamente secar el acuífero.
¿Qué son los Acuíferos?
Un acuífero es una capa de sustrato poroso que contiene y transmite agua subterránea. Cuando el agua puede fluir directamente entre la superficie y la zona saturada de un acuífero, el acuífero no está confinado. Las partes más profundas de los acuíferos no confinados suelen estar más saturadas, ya que la gravedad hace que el agua fluya hacia abajo.
El nivel superior de esta capa saturada de un acuífero no confinado se llama nivel freático o superficie freática. Debajo del nivel freático, donde en general todos los espacios porosos están saturados de agua, se encuentra la zona freática.
El sustrato con baja porosidad que permite una transmisión limitada de agua subterránea se conoce como acuitardo. Un acuicludo es un sustrato con una porosidad tan baja que es prácticamente impermeable al agua subterránea.
Un acuífero confinado es un acuífero cubierto por una capa de roca o sustrato relativamente impermeable, como un acuicludo o un acuitardo. Si un acuífero confinado sigue una pendiente descendente desde su zona de recarga, el agua subterránea puede presurizarse a medida que fluye. Esto puede crear pozos artesianos que fluyen libremente sin la necesidad de una bomba y se elevan a una elevación más alta que la capa freática estática en el acuífero no confinado anterior.
Características
Las características de los acuíferos varían con la geología y la estructura del sustrato y la topografía en la que se encuentran. En general, los acuíferos más productivos se encuentran en formaciones geológicas sedimentarias. En comparación, las rocas cristalinas erosionadas y fracturadas producen cantidades más pequeñas de agua subterránea en muchos entornos. Los materiales aluviales no consolidados acumulados como sedimentos que llenan los valles en los principales valles fluviales y las cuencas estructurales se incluyen entre las fuentes más productivas de agua subterránea.
La alta capacidad calorífica específica del agua y el efecto aislante del suelo y las rocas pueden mitigar los efectos del clima y mantener el agua subterránea a una temperatura relativamente estable. En algunos lugares donde las temperaturas del agua subterránea se mantienen por este efecto a aproximadamente 10 ° C, el agua subterránea se puede utilizar para controlar la temperatura dentro de las estructuras en la superficie.
El volumen de agua subterránea en un acuífero se puede estimar midiendo los niveles de agua en los pozos locales y examinando los registros geológicos de la perforación de pozos para determinar la extensión, profundidad y espesor de los sedimentos y las rocas que contienen agua. Antes de realizar una inversión en pozos de producción, se pueden perforar pozos de prueba para medir las profundidades a las que se encuentra el agua.