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Un árbol de metal crece ante tus ojos

¿Has visto alguna vez un árbol de estaño? En este experimento te enseñamos a crear uno gracias a la reacción química que se produce por el contacto de la electricidad y el estaño.

Con este experimento desafiaremos a la química a través de la electricidad. Y es que la corriente eléctrica, al entrar en contacto con una disolución de cloruro, da lugar a unos curiosos árboles de estaño. Para lograr este fenómeno deberás contar con los siguientes materiales:

  • Cloruro de estaño
  • Bisulfato de sodio
  • Jabón líquido
  • Pilas
  • Electrodos
  • Una placa de Petri.

¿Cómo crear un árbol de estaño?

En primer lugar, mezclamos el cloruro de estaño con el bisulfato de sodio. Esta mezcla dará lugar al cloruro de estaño (SnCl2) que verteremos sobre la placa de Petri hasta que quede completamente cubierta. Para asegurarnos que no queda ningún hueco vacío, podemos utilizar el jabón líquido. Este lo que hará será romper la tensión superficial permitiendo que la solución se extienda mejor sobre la placa.

Una vez la solución de estaño este completamente extendida, conectaremos los electrodos a la placa. Lo haremos sujetando las pinzas al borde de ésta, una frente a la otra. En este momento, debemos asegurarnos de que los electrodos estén en contacto, en todo momento, con la solución disuelta en la placa. Esto es fundamental para que el experimento funcione.

Por último, conectamos las pilas de los electrodos para que se genere electricidad. La corriente eléctrica será la encargada de que, en cuestión de segundos, crezca un árbol de estaño ante nuestros ojos.

¿Por qué crece la dendrita de estaño?

La dendrita de estaño surge debido a una reacción química fruto de la conductividad eléctrica al entrar en contacto con el cloruro de estaño. A este proceso se le conoce como electrólisis y se produce cuando la energía eléctrica cambia la química de una sustancia. Este efecto suele darse en aquellas soluciones que contienen sales, encargadas de transferir los iones entre dos electrodos.

Al colocar las pinzas al borde de la placa, lo que realmente estamos haciendo es conectar la solución disuelta de cloruro de estaño (SnCl2) a las baterías. Cuando la corriente eléctrica comienza a fluir, se crean las dendritas de estaño que siguen la dirección de la corriente eléctrica generada de una pinza a otra.

Si te ha gustado este experimento, te invitamos a seguir aprendiendo sobre química. Además de un árbol, también puedes crear erizos de estaño gracias a una reacción de este elemento con el agua. También puedes crear una cascada de colores a partir de agua, caramelos… y un poco de ciencia. Y por último, puedes descubrir un producto que es capaz de absorber 90 veces su peso ¿sabes de qué se trata?

¡A experimentar!