Para hacer este experimento necesitamos: Dos vasos, hilo de algodón, bicarbonato y agua.
Calentamos el agua, añadimos el bicarbonato bien diluido en el agua, conectamos los dos vasos con el hilo de algodón y esperamos unos días…
¡El resultado son estalactitas!
Pero, ¿por qué?
La mezcla sube por los extremos del hilo hasta el centro del algodón por donde cae gota a gota.
El agua se evapora poco a poco y el bicarbonato forma cristales sobre el hilo.