¿Es posible vivir sin plástico?

La contaminación por plástico afecta a los seres vivos y a los recursos naturales. Aprender a vivir sin este material puede ser una labor algo complicada, pero para nada imposible, y aportaría mucho al desarrollo sostenible de nuestro planeta. Te invitamos a sumarte.

El cambio climático y la preservación del medio ambiente se han convertido en los auténticos desafíos del siglo XXI. Está claro que es necesario poner en marcha medidas radicales y urgentes para controlar las emisiones de CO2 y eliminar la contaminación por plásticos, ya que constituyen una verdadera amenaza para el planeta. Pero ¿te has planteado qué puedes aportar para que este cambio se convierta en una realidad? ¿Es posible vivir sin plástico?

Cómo vivir sin plástico

A nivel mundial se recicla el 9% del plástico producido y consumido, el 12% se incinera y el 79% termina directamente en el vertedero o en el medio ambiente y, en el mejor de los casos, este plástico tarda en descomponerse cientos de años. Solo en Europa se producen más de 60 millones de toneladas de plástico al año, de los cuales tan solo se recicla un 30%.

Con estas alarmantes cifras, la comunidad científica, conocedora de la realidad y de las devastadoras consecuencias que conlleva para todo el planeta la contaminación por plástico, piden a los gobiernos que lo declaren residuo peligroso. Por otro lado, la Unión Europea se ha marcado como objetivo que para el año 2030 todos los plásticos sean reciclables y propone medidas como el fomento a la innovación, un mayor control de los residuos generados por la actividad pesquera y la supervisión del tratamiento de los desechos para que no terminen en mares y océanos.

A nivel individual, podemos reciclar el plástico que consumimos, lo que ayudará a conservar el planeta; pero la solución real consiste en rechazar el plástico de usar y tirar.

Es posible que pienses que con tan solo cambiar de hábitos no vamos a solucionar todos los problemas medioambientales del mundo. Pero el principio de la solución puede pasar por que comencemos a plantearnos cómo vivir sin plástico, ya que con nuestras acciones del día a día estamos contribuyendo al cuidado del medio ambiente.

cómo vivir sin plástico

Consecuencias de la contaminación por plástico

Las consecuencias de la contaminación por plástico no afectan solo a los seres vivos; la calidad del suelo, del aire y del agua también se ven alterada por estos residuos. Gigantescas islas de plástico, pérdida de biodiversidad y una amenaza real para la salud pública son algunos de los resultados directos del uso abusivo de este contaminante material.

  • Islas de plástico: representan una grave amenaza para la vida marina. Actualmente existen cinco enormes zonas de concentración de residuos plásticos en los grandes océanos del planeta: una en el Índico, dos en el Atlántico y dos en el Pacífico.
  • Pérdida de biodiversidad: la ingesta de plástico, el hecho de quedar atrapados, sufrir amputaciones o alterar la propia fisiología de los animales provoca irremediablemente la muerte y extinción de muchas especies.
  • Amenaza para la salud pública: el ser humano no es ajeno al peligro de este tipo de contaminación; la bioacumulación de la cadena alimenticia y el uso de compuestos para su fabricación (Bisfenol A, ftalatos, pinturas, endurecedores…), junto con aquellos que se liberan durante el proceso de degradación, suponen un auténtico riesgo para la salud humana.

Cómo contribuir a reducir el consumo de plástico

Todos somos conscientes de que eliminar el plástico de nuestras vidas es una labor complicada, pero no es imposible. Tras conocer el peligro que supone para el planeta y para nuestra propia salud, quizás sea el momento de que nos comencemos a plantear cómo reducir su consumo.

Cómo vivir sin plástico, tan sencillo como cambiar de hábitos

Aunque el plástico está presente en infinidad de productos de consumo diario, todos podemos contribuir a reducir nuestra huella ambiental; tan solo es necesario adquirir unos nuevos hábitos de consumo: ¡no es tan difícil! Te proponemos algunas de las acciones que puedes llevar a cabo:

  • Usa bolsas reciclables.
  • Compra productos a granel y deposítalos en tus propios envases reutilizables (fiambreras de cristal o de acero inoxidable).
  • Consume agua de abasto en lugar de agua embotellada: contienen las mismas propiedades. Si no tienes más alternativa que el agua embotellada, opta por adquirirla en envases retornables.
  • Evita los productos de un solo uso como pajitas, cubiertos, vasos y platos de usar y tirar.
  • Envuelve los bocadillos y sándwiches en bolsas de telas o papel, así evitarás el uso del film transparente. Tus almuerzos los puedes transportar en recipientes de cristal o de acero inoxidable.
  • Opta por adquirir productos envasados en cartón o vidrio, y evita aquellos que vienen envasados en bandeja de poliuretano.
  • La mayoría de los productos de limpieza y de higiene personal que adquirimos están envasados con plástico; estos se pueden sustituir por productos de limpieza naturales como el vinagre o los jabones naturales.
  • Plantéate adquirir ropa de segunda mano o, al menos, evita la ropa fabricada con poliéster.

Desde Fundación AQUAE te animamos a que te sumes a la iniciativa de vivir sin plástico. Con pequeñas acciones en tu día a día estarás potenciando un consumo responsable y sostenible.

Actualizado: 27/05/2021