La ballena rorcual, un discreto cetáceo que vive en el Mediterráneo
El nombre científico de la ballena rorcual es Balaenoptera physalus. Es una especie común en el Mar Mediterráneo y, después de la ballena azul, es el cetáceo más grande. En concreto, puede alcanzar una longitud de hasta 27 metros.
Estilizado y largo, su cuerpo posee una coloración gris parduzco salvo en la parte inferior, que es más blanquecina. Además, cuenta con un hocico puntiagudo, un morro de lo más amplio y achatado, y espiráculos dobles. Se distingue esta rorcual tropical por tres crestas longitudinales que le recorren su rostro gris oscuro, además de esos surcos claros de la garganta. El rorcual común presenta una asimetría, clave para identificar a la especie, que consiste en una marca blanca a la derecha de la mandíbula inferior, mientras que el lado opuesto es negro o ceniciento.
Los expertos señalan que un adulto puede llegar a pesar en torno a 70 toneladas. Su enorme tamaño contribuye sobremanera en la identificación de este tipo de ballena, que puede llegar a confundirse con otras especies como el rorcual boreal, el rorcual azul o el rorcual de Bryde.
¿Dónde vive la ballena rorcual?
Cada año, las rorcuales tropicales permanecen más tiempo en las Islas Canarias. Sí es cierto que esta especie se distribuye por la mayoría de los océanos de zonas templadas y polares, y se ha convertido en uno de los cetáceos más habituales del Mediterráneo. Pese a su gran tamaño, suelen ser muy discretas y, aunque se asomen a la superficie para cazar, no suelen mostrar su aleta caudal.
No realizan migraciones como tal, pero sí pueden cambiar de hábitat dependiendo de la estación del año en la que nos encontremos. En lo que respecta a su comportamiento, el rorcual común puede moverse de dos formas bien diferenciadas: en solitario o en pequeños grupos.
¿Qué come el rorcual común?
La ballena rorcual se alimenta desde copépodos o pequeños crustáceos hasta peces como el capelán o el arenque. En este sentido, se alimenta abriendo las mandíbulas mientras se desplaza a una velocidad alta en relación a sus dimensiones, engullendo hasta 70 metros cúbicos de agua en cada ingesta. Es en ese momento cuando cierra sus mandíbulas y empuja con fuerza el agua hacia fuera a través de las barbas. Así, el agua sale mientras captura a las presas.
Esta especie, por norma general, en las profundidades marinas (unos 200 metros de profundidad) también se alimenta de krill y dedica en torno a tres horas diarias para satisfacer sus necesidades alimenticias. Por lo tanto, se consideran como depredadores muy activos.
¿Cómo es su ciclo reproductivo?
El periodo de gestación de esta gigantesca especie se prolonga hasta casi un año. En este sentido, el encuentro entre machos y hembras tiene lugar en los meses de invierno en mares templados. Las hembras tienen solamente una cría cada dos o tres años, lo que unido a la caza a la que se ha visto sometida en algunos lugares del planeta, ha provocado que se encuentre actualmente en peligro de extinción.