Descubre el canal de Castilla y su origen
Castilla era el granero de España, pero no podía sacar sus excedentes fuera de la meseta por las malas infraestructuras de comunicaciones. Un canal de navegación que atravesara la meseta desde Reinosa hasta Segovia, enlazando con las carreteras existentes. Podrían sacar el cereal a la costa cantábrica, y por tanto al resto de puertos peninsulares, y favorecer el comercio interno. Y así nació el canal de Castilla.
Para llevarlo a cabo el ingeniero Antonio de Ulloa presentó un diseño basado en otras obras anteriores del francés Carlos Lemaur. Más tarde fue mandado traer a España por el marqués de la Ensenada para dirigir junto con el anterior las obras de este nuevo canal. El primer diseño contaba con cuatro ramales, de los que finalmente se construyeron tres, con sus dársenas finales en Alar del Rey, Medina del Rioseco y Valladolid. Otra dársena importante fue la de Palencia.
Características del Canal de Castilla
Este canal de navegación cuenta en la actualidad con un recorrido de 207 km y un desnivel total de 150 m, repartido en tres ramales, el ramal Norte, de Alar del Rey a Calahorra de Ribas; el de Campos, de Calahorra de Ribas a Medina de Rioseco, y el Sur, que va de El Serrón a Valladolid. El desnivel se va salvando con esclusas, una especie de ascensores hidráulicos que permiten a las barcazas remontar y descender el canal en puntos concretos de mayor desnivel del terreno. En el resto del canal, la pendiente no supera el 2 por mil, así las barcazas pueden recorrer el canal en ambos sentidos casi con la misma facilidad y el agua del canal pueda correr sin estancarse. Las mulas tiraban de las barcazas, que recorrían los caminos de sirga.
En cada una de esas esclusas, construidas en piedra y con puertas de madera, se instalaba además un molino de harina, u otro tipo de fábrica, para aprovechar la fuerza del agua provocada por el desnivel del canal. La mayor parte de las esclusas tienen un sólo nivel. Hay algunas de dos, tres e incluso cuatro niveles. Este es el caso del grupo de Frómista, formado por las esclusas llamadas 17, 18, 19 y 20, que salva así 14,20 m.
Otras obras importantes y singulares del recorrido son la presa de San Andrés que permite el cruce del canal con el río Pisuerga sin que el nivel de agua del canal decrezca, el acueducto de Abánades que permite que el canal pase sobre el río Valdavia. Estas tres curiosas obras están en el ramal Norte, el de mayor desnivel, 85 metros, que se salvan gracias a 24 esclusas, con sus correspondientes fábricas de harina, de papel, de curtidos…
Su construcción
La construcción del canal de navegación fue larga y llena de problemas. Al año de empezar el ramal de Campos y habiendo construyo sólo 25 km las obras se paralizan. Se reanudan en 1759 en el ramal Norte. Esta vez se acaba el ramal de una vez, pero después de 32 años de trabajo, en 1791. Al año siguiente comienza la navegación en Alar del Rey, Palencia. Vuelven a parar por Guerra de la Independencia. Con estos y muchos problemas más el canal se termina por fin en el año 1849. Sin embargo pronto empieza la competencia del ferrocarril que echa al traste con todos esos años de trabajo. Además supone el principio del fin del sueño ilustrado y la primera experiencia a gran escala de industrialización del campo castellano.
A partir de la segunda mitad del siglo XX se realizan las obras para adecuar el canal para regadío. Se quitan las puertas de las esclusas y transformándolas en presas. También aprincipios del siglo XXI comienzan otras para adecuar las instalaciones al uso turístico. Se remodelan los caminos de sirva en pistas para bicis y volviendo a poner las puertas en algunas esclusas y recuperar el uso primigenio del canal, la navegación.