8 medidas para restablecer la salud del océano

En la revista científica Aquatic Conservation, expertos del Programa Internacional para el Estado del Océano han publicado un estudio en el que alertan de la necesidad de implementar y tomar medidas urgentes para detener el calentamiento climático y evitar más acciones humanas que pongan en peligro el funcionamiento de los océanos a escala mundial y los ecosistemas. Porque, además del daño que se ocasiona a ellos, tiene influencia en la vida humana. La salud de los océanos es esencial para nosotros.

Un estudio para llamar a la acción

Las conclusiones de este estudio han sido realizadas por un equipo de expertos provenientes de diferentes disciplinas. Desde oceanógrafos a abogados, políticos y economistas, han analizado y condesado 131 artículos científicos alrededor de los cambios oceanográficos que se han producido. Un total de 120 se han publicado en poco menos de cinco años.

«Estamos presenciando un incremento en la temperatura, las perturbaciones y la acidificación del océano, un aumento de las invasiones biológicas y la eutrofización y una reducción de los niveles de oxígeno. Algunos de estos fenómenos actúan como un trinquete: una vez que los cambios negativos o dañinos se han producido, puede ser que se instalen de forma permanente y ya no sean reversibles, especialmente a la gran escala que suponen los procesos biológicos oceánicos», explican en el estudio.

La evaluación, “Ocho pasos fundamentales y simultáneos necesarios para restablecer la salud del océano, y las consecuencias del retraso o la inacción para la humanidad y el planeta”, tiene como objetivo evaluar los cambios que se están produciendo y las consecuencias de no estar poniendo soluciones a ello.

Por ejemplo, el estudio evidencia que una menor productividad de la cadena trófica marina, la menor capacidad de almacenar carbono, la reducción de los niveles de oxígeno y la posible liberación a la atmósfera del calor almacenado zona algunos de los múltiples cambios que se están produciendo en los océanos debido a la actividad humana.

Ocho acciones prioritarias

El informe incluye ocho acciones prioritarias para realizar de manera conjunta y al unísono. Así se podrá evitar que se puedan producir peores situaciones y la salud de los océanos se vea todavía más mermada, incluidos cambios que se consideran irreversible. Unas medidas que pasan por:

• Enfrentar el calentamiento global de manera directa para limitar el incremento de la temperatura a 1,5ºC. Pero también prepararse para un posible aumento de entre 2ºC y 3ºC.
• Llevar a cabo una moratoria a la minería de aguas profundas durante la reunión anual de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos (ISA). Podría perturbar los depósitos de carbono de los sedimentos marinos y reducir la capacidad del océano para absorber CO2 y mitigar la emergencia climática actual.
• Aprobar un Tratado de Alta mar «sólido» que cuente con una Conferencia de las Partes y un comité científico.
• Reformar los derechos de voto en organismos internacionales como la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos. Así se evitará que los intereses particulares socaven el principio de precaución.
• Respetar las normas de las áreas marinas protegidas para lograr proteger al menos el 30% del océano. Garantizar una gestión «eficaz» para evitar los efectos adversos en el cien por cien del océano.
• Acabar con la sobrepesca y las prácticas pesqueras destructivas, incluida la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.
• Reducir radicalmente la contaminación de las aguas marinas, tanto por fertilizantes, como por aguas residuales o por plásticos.
• Proporcionar un mecanismo de financiación para la gestión y la protección y gravar fiscalmente las actividades no sostenibles e intensificar la investigación científica.

La salud de los océanos resulta alarmante

El documento refleja que el calentamiento de los océanos se está acelerando y que se está produciendo a un 40% de media por encima de lo estimado por la ONU hace cinco años y que ese calentamiento de las capas superiores está alterando la fuerza del oleaje.

Por otro lado, observan que los océanos están empezando a liberar parte de la energía térmica que tienen almacenada. Esto podría contribuir a incrementos de temperatura significativos a nivel mundial en los próximos años. Advierten también una «alarmante tendencia» a niveles decrecientes de oxígeno en el océano y el hielo se funde más rápido de lo previsto, con el correspondiente aumento del nivel del mar.

«Tenemos que actuar en relación con el cambio climático, pero también es imperativo y urgente que desarrollemos resiliencia. Si el océano se colapsa, toda la vida en la Tierra estará en peligro. El presente artículo establece ocho pasos prácticos, pero ambiciosos, que hay que dar de forma simultánea para contribuir a evitarlo«, concluye el informe.