Microrrelatos

La manzana de Eva

Querido Isaac:
Cuando Dios preguntó a Adán por qué había comido el fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, respondió que la mujer se lo había dado a probar.
Ahora tú, con esa teoría de la gravitación universal, no solo explicas por qué pisamos el suelo, también el equilibrio de la Tierra y la Luna, el giro de los planetas en torno a los astros, la fuerza con que se atraen las estrellas… Has revelado el plan de Dios para el Universo. Esta vez, si te preguntan, di que la manzana cayó sobre ti involuntariamente.