Para realizar este experimento necesitaremos: Cerillas, agua y un puntero láser.
Colocamos una cerilla doblada en la caja. Con otra cerilla vamos añadiendo gotas de agua poco a poco hasta formar una gota en el extremo. Apuntamos el láser hacia la gota de agua de la cerilla...
¡Y podemos observar los micro-organismos del agua!
Pero, ¿por qué?
El láser choca con la superficie de la gota. Esta distribuye la luz permitiéndonos observar los micro-organismos que contiene el agua. Y gracias a la gota de agua y su forma cóncava, podemos ver aumentados los micro-organismos en el pared como si fuese un microscopio.
¡Y podemos observar los micro-organismos del agua!
Pero, ¿por qué?
El láser choca con la superficie de la gota. Esta distribuye la luz permitiéndonos observar los micro-organismos que contiene el agua. Y gracias a la gota de agua y su forma cóncava, podemos ver aumentados los micro-organismos en el pared como si fuese un microscopio.