Las frutas y verduras pueden servirnos para fabricar nuestros propios colorantes caseros. A continuación, os traemos un nuevo experimento sobre cómo crear colorantes caseros de forma sostenible. En esta ocasión lo haremos a partir de una naranja.
En anteriores experimentos ya aprendimos a crear colorante casero azul a partir de una lombarda. En esta entrega nos atrevemos con un nuevo color y una fruta: la naranja.
Antes de empezar con este experimento, es importante que cuentes con los siguientes materiales que te ayudarán a que sea un éxito:
- Naranjas.
- Un cuchillo.
- Un molinillo de café.
- Un recipiente.
Pasos que seguir para crear colorante casero naranja
En primer lugar, pela la naranja. Hazlo de forma que, cuando cortes la corteza, te quedes con la menor cantidad de la capa blanca que hay debajo de la principal y que recubre esta fruta. Una vez hayas cortado toda la piel de la naranja, córtala en pequeños trozos.
A continuación, deberás secar la piel de la naranja. Para esto, introduce los pequeños trozos, cortados previamente, en el microondas. Hazlo en tandas de 30 segundos a máxima potencia. Evita que se quemen y cuando se encuentren totalmente secos, tritúralos.
Una vez realizado todos estos pasos verás que la piel de la naranja se ha convertido en una masa arenosa compuesta de diminutos trozos de la fruta. De esta forma ya habrás creado tu propio colorante casero.
Una fruta compuesta por agua
Entre los alimentos que más agua contienen se encuentran las naranjas. Y es que más del 90% de esta fruta es agua.
Esta característica de la naranja resulta esencial para el éxito de este experimento. Y es que cuando introducimos la piel de la naranja en el microondas lo que estamos haciendo precisamente es eliminar todo ese agua que contiene en su interior.
Al deshidratar la piel de la naranja, la textura de su piel pasa a ser arenosa y se deshace fácilmente. Si a esta masa arenosa la disolvemos en agua y gelatina dará como resultado a un líquido denso que puede ayudarnos a darle color a nuestros postres.
Es importante recordar que los colorantes derivados de vegetales no contienen ninguna sustancia dañina para el ser humano. Así que seguro que se te ocurren otras formas de utilizar este colorante casero. ¡Se creativo y experimenta!
Si te ha gustado este experimento y quieres seguir aprendiendo a crear colorantes caseros a través de otros sencillos experimentos vinculados al agua, te invitamos a crear colorante azul de forma sostenible y a descubrir como hacer una cascada de colores. Además, puede aprender cómo se produce fenómenos físicos como la refracción de la luz y cómo el agua puede ser un auténtico conductor de electricidad.
