‘Oceanix City’: Una ciudad flotante, autosuficiente y alineada con los ODS

Oceanix está dando pasos audaces hacia un futuro más resistente. Ha diseñado esta ciudad flotante y autosuficiente para que las personas vivan de manera sostenible en el océano. La tecnología existe para que podamos vivir en el agua, mientras que la naturaleza continúa prosperando bajo ella. 

El océano está amenazado por la recuperación de tierras. Mientras las ciudades costeras luchan por hacer frente al rápido crecimiento de la población, muchas simplemente vierten arena en el océano para crear nuevas tierras. La urbanización costera sin restricciones está destruyendo millones de hectáreas del océano y la vida marina; cerca del 50 por ciento de la población mundial vive en zonas costeras. El aumento del nivel del mar y el cambio climático están agravando el problema.

Un proyecto en la ONU-Habitat

El cambio climático y el calentamiento global que ha producido y sus consecuencias han creado un escenario global que requiere de soluciones de todo tipo. Los niveles del mar están aumentando, a lo que se debe sumar la falta de viviendas accesibles, algo que ha llevado a diseñadores, arquitectos y desarrolladores a reimaginar nuestro paisaje urbano mediante una nueva perspectiva: contemplando las opciones que ofrece el mar.

De este modo, las ciudades flotantes se presentan como una opción viable para el futuro. ONU-Habitar, una agencia de la Organización de las Naciones Unidas, organizó una mesa redonda sobre ciudades flotantes sustentables. El líder de esta iniciativa es Bjarke Ingels Group (BIG), que presentó diseños para un área urbana moderna que flote sobre el océano.

Oceanix City

Se trata de “Oceanix City”, una ciudad flotante y autosuficiente de 10,000 habitantes construida a partir de islas hexagonales ancladas al fondo del océano. La ciudad está diseñada para soportar climas adversos, puede producir su propia comida y energía, además de administrar el agua y la eliminación de desechos. Es una urbe modular que puede crecer y desarrollarse de manera orgánica a lo largo de los años. Puede convertirse en refugio para aquellos que se vean desplazados en alta mar debido a desastres naturales o la falta de opciones de vivienda accesible.

(C) Bjarke Ingels Group

Durante su presentación en la ONU, Bjarke Ingels (socio fundador de BIG) explicó que “nueve de las diez ciudades más grandes del mundo estarán expuestas a los niveles crecientes del mar para el año 2050. El mar es nuestro destino y también puede ser nuestro futuro. Oceanix City  la primera comunidad flotante sustentable y autosuficiente. Está diseñada como un ecosistema creado por el hombre que canaliza flujos circulares de energía, agua, alimentos y desechos. Un modelo para una metrópolis marítima modular anclada los Objetivos de Desarrollo sustentable de la ONU”.

Por su parte, Maimunah Mohd Sharif, Director Ejecutivo de ONU-Hábitat, declaró que “debemos trabajar para garantizar que los beneficios de los avances tecnológicos sean un derecho básico, no un privilegio para unos pocos. ONU-Hábitat está listo para proporcionar la plataforma para que podemos involucrar a las mejores mentes en cada parte del mundo”.

(C) Bjarke Ingels Group

Una ciudad flotante que puede crecer

Aunque existen modelos previos parecidos, una de sus grandes innovaciones es que puede crecer. Cada isla mide alrededor de 18,000 metros cuadrados, y un grupo de seis islas forman un pueblo alrededor de un puerto. Cada una incluirá servicios cívicos y de vivienda, así como una escuela, un hospital o centros comerciales. Las más pequeñas y deshabitadas alrededor del perímetro se dedicará al cultivo de alimentos o a la recolecta de energía. Proporcionarán a su vez amortiguación contra el viento y las olas.

Para mantener la estructura en armonía con el medio ambiente, las islas se anclarán al océano. Lo harán usando un material que estimula el crecimiento de piedra caliza de los depósitos minerales en el mar. Este material ecológico, Biorock, estimula el crecimiento de los arrecifes de coral.