¿Por qué las mariposas se acercan a la luz?
Jean Rhys contaba en “Ancho mar de los Sargazos”, novela ambientada en Jamaica, que las mariposas nocturnas, atraídas por la luz en la noche caribeña, se quemaban en la llama de las velas. Al ver que las mariposas se acercan a la luz, resulta imposible no preguntarse por qué sucede este curioso fenómeno que muchas veces es letal para ellas.
Se conoce que las luces en la noche constituyen una circunstancia excepcional y relativamente nueva sobre la Tierra. Por ello las mariposas nocturnas no han tenido tiempo aún de evolucionar y, en su mayoría, siguen cayendo en la trampa. Los entomólogos han intentado explicar por qué las mariposas, siendo nocturnas, se ven tan atraídas por las luces. La clave parece estar en entender cómo afecta la fototaxis a estos peculiares voladores.
¿Por qué las mariposas se acercan a la luz?
Aparentemente, no hay un motivo que explique por qué la mariposas son atraídas por la luz tanto.
Es un fenómeno que se describió hace muchos años y que se repite en todas partes todas las noches de verano, pero para el que no hay una explicación clara. Se puede elucubrar que supone un elemento que no es natural en la evolución de estos insectos, por lo que reaccionan de una manera imprevisible. Y, aunque según el entomólogo Constantí Stefanescu, hay estudios que describen el mecanismo, la explicación última todavía se desconoce.
Aún así, se podría afirmar que la novedad, las mata. Porque la luz llega a quemar y, sin embargo, son miles las especies nocturnas que no pueden resistir la atracción que supone un punto luminoso en el oscuro y rutinario paisaje de la noche. Empero, hay especies de mariposas que no se sienten atraídas por la luz y no caen en la trampa, como las del género Catocala.
El resto de mariposas describe círculos cada vez más cercanos a la fuente luminosa, a ese elemento nuevo en una historia que se remonta en la Tierra a más de cien millones de años, cuando nadie existía, ni encendía para la cena un farol o una vela.
¿Tienen las polillas un comportamiento suicida?
Las polillas que baten sus alas para llegar a las luces del alumbrado eléctrico es una escena muy frecuente en el verano. Las polillas son un tipo de mariposa pequeña nocturna que pertenecen a las familias de lepidópteros, tineidos y pirálidos. Con la llegada del verano, su presencia aumenta considerablemente.
Las polillas son mariposas que se acercan a la luz emitida por las bombillas. Estas pequeñas mariposas que viven fundamentalmente en la oscuridad tienen unos elementos dentro de sus ojos que sintonizan con al luz tenue. De alguna manera, se podría decir que estas lentes les sirven como telescopios en miniatura. Es lo que se conoce como fototaxis, que es la reacción de los organismo celulares ante un estímulo luminoso.
La fototaxis hace que las mariposas se sientan atráidas a la luz
Cuando las polillas identifican la presencia de luz artificial intensa, se ven superestimuladas y se acercan hacia el foco de luz. Esto suele tener consecuencias nefastas para ellas, ya que al ser atraídas por el brillo de la luz, las polillas se vuelven más visibles y acaban en ocasiones devoradas por depredadores. En otros casos, esta reacción natural aparentemente suicida termina con la muerte de las polillas por sobrecalentamiento.
Lo que Thomas Edison no pudo vaticinar es que con su bombilla acabaría diseñando una trampa letal para estas nocturnas mariposas que se acercan a la luz. La luz artificial confunde a estos animales voladores, haciendo que su medio de orientación se vea alterado. Las polillas generalmente utilizan la luz de las estrellas y la luna para moverse por el entorno. También estas fuentes naturales de luz actúan como referencias en sus movimientos migratorios.