Con su proyecto “Vigilantes del Lago”, el chileno Víctor Durán tiene como objetivo revertir una situación. Los lagos de Chile son ecosistemas muy contaminados donde. En algunos casos, la transparencia de sus aguas ha disminuido desde un promedio de 15 metros a menos de 10 metros. Teniendo en cuenta el cambio climático y la contaminación, los lagos se convertirán en las principales fuentes de agua potable, de ahí la necesidad imperiosa de llevar a cabo proyectos e iniciativas que cuiden estos ecosistemas. Una situación que se agrava todavía más, dado el desconocimiento de las autoridades y de las comunidades respecto a su fragilidad y a que son de gran relevancia en algunas zonas del planeta para su realidad económica desde un punto de vista cultural y social.
Doble objetivo de los Vigilantes del Lago
Durán lleva a cabo un trabajo de empoderamiento de comunidades chilenas para conseguir un trabajo conjunto que implique a diferentes sectores con el fin de proteger los lagos. Durante el 2018 su actividad se ha concentrado en los lagos Villarrrica, Caburgua, Calafquen, Panguipulli, Ranco, Puyehue y Llanquihue con un doble objetivo:
-Lograr que los lagos de Chile más contaminados tengan planes de prevención o descontaminación.
-Que los más vulnerables tengan normas secundarias de calidad ambiental base para poder declararlos latentes o saturados.
Cómo conseguirlos
Para conseguir estos objetivos, han llevado a cabo cuatro líneas de actuación:
-Empoderando a la comunidad como “vigilantes del lago”.
-Entregando herramientas de monitoreo a las comunidades.
-Incentivando a las autoridades locales a cuidar de sus lagos.
-Participando en mesas técnicas para el desarrollo de normativas y planes específicos de descontaminación.
Acciones en 2018
Dentro de estas cuatro líneas de actuación, “Vigilantes del Lago” ha realizado a lo largo de 2018 varias acciones concretas como:
-Ha conseguido convenios con hasta 6 municipios (Pucon, Panguipulli, Futrono, Puyhue, Puerto Varas y Frutillar). Esto ha permitido al proyecto de Durán estar presente en varios lagos como Cagurgua, Villarrica, Calquen, Ranco o Puyehue.
-Ha realizado programas de captación y monitoreo en escuelas y organizaciones de la sociedad civil que ha llegado a un centenar de estudiantes y de vecinos.
-Se han instalado dos laboratorios y entregado 10 mochilas limnológicas. Se trata de una herramienta pedagógica y de monitoreo ciudadano de lagos. Es apta para ser usada tanto por estudiantes y vigilantes del lago de la comunidad.
-Realización y entrega al Ministerio del Medio Ambiente de 7 informes sobre el estado de los lagos, y reuniones de trabajo ministeriales para proponer normas secundarias de calidad ambiental.
-Creación del Premio Lago Azul para municipios para fomentar la preocupación por los lagos. El premio en 2018 recayó en el municipio de Panguipulli.
-Propuestas de medidas de descontaminación.
Datos que certifican la actividad de un proyecto en expansión y que muestra resultados concretos en las comunidades en las que está operando a la hora de involucrar y empoderar a las comunidades y a sus habitantes en el cuidado de sus lagos de Chile, creando conciencia de la fragilidad de unos ecosistemas esenciales.