Uno de los principales problemas que afecta a nuestros ecosistemas y a su biodiversidad es la deforestación y la pérdida de calidad del suelo. En concreto, casi un 74% del territorio español se encuentra en tierras áridas, semiáridas o subhúmedas secas y, por tanto, susceptibles de ser afectadas por los procesos de desertificación, según el Ministerio para la Transición Ecológica.
En este contexto, Fundación Aquae puso en marcha el proyecto Sembrando Oxígeno, una iniciativa destinada a reforestar terrenos con el fin de luchar contra el cambio climático, combatir la desertificación y frenar la pérdida de biodiversidad, además de restaurar y proteger nuestros ecosistemas y compensar CO2 para mejorar la calidad del aire.
En total, el proyecto ha permitido plantar más de 15.000 árboles en 13 de puntos de la geografía española, en municipios de Andalucía, Aragón, Asturias, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Galicia, Región de Murcia.
Además de la vertiente medioambiental, Sembrando Oxígeno siempre ha procurado un objetivo social, ya que en varias reforestaciones se ha contratado a personas en riesgo de exclusión para apoyar en las labores de recuperación forestal, y se ha involucrado a asociaciones, centros educativos o a la sociedad en general en las mismas tareas. Por eso, estas campañas de reforestación han estado acompañadas de talleres medioambientales para abordar cuestiones relativas a la plantación, la importancia que tienen los árboles para el planeta o consejos para proteger el medioambiente.
Avilés (Asturias), Calatayud (Zaragoza), Cartagena (Región de Murcia), Granada, Muíños (Ourense), Pego (Alicante), Torrevieja (Alicante) y Zamora han sido algunos de los municipios que han acogido una o varias de estas jornadas que Fundación Aquae ha organizado de la mano de empresas gestoras del agua en esos territorios como Aguas de Avilés, Aquara, Hidrogea, Aquaourense, Hidraqua o Aquona.
Previamente a la ejecución de cada uno de estos trabajos, se han llevado a cabo estudios técnicos para analizar qué tipo de especies introducir en cada municipio para generar masas arboladas capaces de permanecer en el tiempo.
Del mismo modo, también se hace un seguimiento de la evolución de las plantaciones para que prosperen de forma adecuada. La última jornada de mantenimiento se ha realizado a finales de 2023 en la localidad aragonesa de Calatayud, donde se repusieron algunos de los 1.200 ejemplares plantados en enero que no habían superado los rigores del verano.
Reducir la huella de carbono
Sembrando Oxígeno nacía con un doble objetivo: reforestar zonas forestales y, a su vez, compensar la huella de carbono. La huella de carbono, que se mide en masa de CO2 equivalente, es la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto de un individuo, organización, evento o producto. Una vez conocido el tamaño y la huella es posible implementar una estrategia de reducción y/o compensación de emisiones.
Los árboles cumplen una doble función: absorben CO2 y generan oxígeno. Por esta razón, la acción de reforestar es una forma de actuar en favor de la sostenibilidad del planeta. Porque plantar árboles es sembrar oxígeno.
Gracias a su trabajo en este ámbito, Fundación Aquae fue la primera fundación de ámbito privado que recibió el triple sello (Calculo–Reduzco-Compenso) del Ministerio para la Transición Ecológica, Alimentación y Medio Ambiente.
Recuperación de ecosistemas
Desde hace años, organismos internacionales como el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) vienen advirtiendo de la clara necesidad de tomar medidas que ayuden a restaurar y conservar nuestros entornos antes de que sea demasiado tarde. Sin ir más lejos, en 2020 daba comienzo el Decenio para la Restauración de los Ecosistemas, iniciándose así la cuenta atrás para tomar medidas que ayuden a proteger nuestro medio natural antes de que los efectos de la crisis climática sean irreversibles.
En el camino hacia una sociedad más respetuosa con la naturaleza, las generaciones más jóvenes van a jugar un papel fundamental. Según datos del Instituto de la Juventud (Injuve), la protección del medio ambiente es una de las principales preocupaciones de los jóvenes españoles. El 76% considera el cambio climático como uno de los problemas más importantes del país.
La educación ambiental, más allá de formar parte del proceso educativo, debe ser una herramienta esencial para asentar las bases de un estilo de vida más sostenible. Comprender el efecto de nuestras acciones y rutinas en el entorno que nos rodea, así como encontrar aquellas que mejor se adapten a la protección de nuestros ecosistemas, son algunos de los objetivos que se persiguen con la educación medioambiental.