Seis años apostando por la educación inclusiva

Nuestra alianza con la Fundación ONCE es un modelo necesario para avanzar hacia sistemas educativos más inclusivos. Un vínculo que nos une desde 2013, y que nos llevó en 2017 a comenzar a apoyar sus recién estrenadas Becas “Oportunidad al talento”, cuyo objetivo principal no es otro que promover el progreso académico de los estudiantes con discapacidad en el ámbito de la educación superior. De esta forma Aquae quiere apoyar la formación de excelencia, la movilidad transnacional, la especialización de los estudiantes con discapacidad en áreas de especial empleabilidad, así como la compatibilidad de la práctica deportiva de competición con los estudios.

Desde entonces, en estos seis años de relación, Abel, Victoria, Samuel, Silvia, David, Paula L., Jorge y Paula S. han pasado a formar parte de los jóvenes vinculados a Aquae gracias a la Fundación Once. Jóvenes que desarrollan su talento tanto en España como fuera de nuestras fronteras y a los que nuestro apoyo les ha ayudado a seguir creciendo y a demostrar así toda su valía. Y a esos ocho nombres, este año se unirán dos nuevos estudiantes universitarios. Alcanzando tras esta edición la decena de becados.

Así, el 19 de diciembre conoceremos a los beneficiarios de estas dos nuevas becas que Fundación Aquae apoya con el fin de formar a los futuros profesionales del medioambiente, la sostenibilidad y la educación.

El valor de la educación

La educación es una herramienta fundamental para lograr la transformación de la sociedad. Es clave para asegurar el empoderamiento económico, individual y social tanto de individuos como de comunidades enteras. Es por eso, que ofrecer oportunidades educativas, a aquellos miembros de nuestra comunidad que por diferentes motivos tienen dificultades para acceder a ella, es una meta común e inquebrantable, porque un acceso igualitario permitirá alcanzar de manera gradual la equidad, el respeto y la inclusión.

No solo eso, logrará mejorar la convivencia, la cooperación y la igualdad, por lo que ampliar las opciones de alcanzar cotas más altas de conocimiento, de desarrollo y de aprendizaje significa contribuir a un futuro en donde todas las voces sean escuchadas.

La pandemia ya puso de manifiesto la urgente necesidad de garantizar una educación inclusiva y equitativa para todos. Por eso, tanto las empresas como todas las entidades sociales tienen una importante misión que cumplir si se quiere conseguir un futuro mejor. El trabajo que aportan todas y cada una de ellas contribuirá a alcanzar una sociedad más equilibrada al apostar por el talento innato de todas las personas, al ofrecerles mayores oportunidades de desarrollarse y crecer.

Un 25% de paro entre este colectivo

Según el Observatorio Estatal de la Discapacidad, existen 1,8 millones de personas en España con discapacidad y, lamentablemente, una amplia mayoría no ha recibido la formación académica adecuada. Esto tiene un enorme impacto que se ve reflejado en la tasa de desempleo que supera el 25% entre este colectivo. Por lo tanto, y dado este panorama, resulta necesario abordar esta situación para promover la inclusión laboral.

Estas cifras ponen de manifiesto que es crucial reconocer la importancia de la inversión en capital humano como una forma de construir un puente hacia un mercado laboral más accesible. Y no cabe ninguna duda de que destinar recursos a la educación es una de las mejores opciones posibles.

En definitiva, el empoderamiento de la sociedad es un compromiso global al que no se puede renunciar.