¿Cuánto sabes sobre las abejas?

Son 20.000 especies aproximadamente las que se conocen en el mundo y de siete a nueve familias reconocidas, aunque muchas no están descritas y el número real es probablemente más alto.

Durante siglos, las abejas han beneficiado a las personas, las plantas y el planeta. Al transportar el polen de flor en flor mejoran la producción de alimentos. Con ello no solo influyen de manera positiva sobre la nutrición, sino también sobre el medio ambiente, ayudando a la biodiversidad y los ecosistemas.

Las abejas están perdiendo su hábitat, lo que puede ocasionar un declive de la polinización con consecuencias como estas. Los monocultivos, los pesticidas y las temperaturas cada vez más altas debido al cambio climático plantean problemas para la población de abejas y, por extensión, para la calidad de los alimentos cultivados.

A diferencia de otros insectos voladores, que baten las alas formando un ángulo de entre 145 y 165 grados, el de las abejas es menor a 90 grados, pero lo hacen a mucha más velocidad con una frecuencia de 230 veces por segundo. Esta rapidez es la que ocasiona su característico sonido al volar.

Una abeja tiene 5 ojos: 3 ojos simples en la parte superior de su cabeza, sobre la frente, y 2 ojos compuestos, con numerosas facetas hexagonales, en cada lado de la cara.

Del polen extraen su fuente de energía, mientras que del néctar obtienen proteínas y otros nutrientes. Durante los meses de invierno, cuando no pueden encontrar ni néctar ni polen, se alimentan de la miel que producen.

Las abejas absorben con su lengua el néctar de las flores y se lo introducen en el buche, regresando a la colmena donde lo entregan a las obreras jóvenes. Después, vuelven a salir en busca de más néctar.

Tiene dos pares de alas en el tórax que al estar entrelazadas entre sí dan la impresión de ser un solo par. Las alas de las abejas son muy suevas y delgadas. Además, tienen seis patas unidas al tórax.

Las abejas llevan a cabo una serie de desplazamientos y movimientos a modo de danza que sus compañeras observan e interpretan. Así, las abejas obreras transmiten a sus pares la dirección y distancia de la fuente de polen, regresan a su colmena y proceden a informar al resto de las abejas de la colonia.

Las abejas distinguen los colores azul, amarillo y blanco, pero no el rojo. Y confunden el verde con el amarillo y el azul. Además, pueden ver una gama de colores en el extremo ultravioleta que es un espectro invisible para la visión humana gracias a un tipo de pelo que tienen en sus ojos.

La abeja reina pone los huevos fecundados que dan origen a las abejas obreras infértiles y pone los huevos no fecundados que dan origen a zánganos fértiles mediante un mecanismo denominado partenogénesis.

La abeja reina puede vivir entre 3 y 4 años, aunque en condiciones favorables puede alcanzar los 5 años. Las abejas obreras viven entre 6 y 7 semanas. Los zánganos alrededor de los 3 meses.

China produce más de 650.000 toneladas de miel por año y consume el 75% de esa cantidad en el ámbito local. Turquía, Estados Unidos, Irán, Rusia, India, México, Brasil, Ucrania y Nueva Zelanda completan el ranking de países productores de miel más importantes del mundo.