¿Cuánto sabes sobre la gota fría?

Este frente de aire polar frío avanza lentamente sobre Europa occidental a gran altura y, al chocar con el aire más cálido y húmedo del Mar Mediterráneo, genera fuertes tormentas. En meteorología, se designa con el término "gota fría" al volumen limitado de aire frío en los niveles altos de la atmósfera, que en una carta meteorológica está representado rodeado con isotermas cerradas.

La realidad es que estas dos corrientes de aire se pueden generar y chocan en cualquier momento del año, y sin embargo los efectos de las mismas son más notorios durante el principio del otoño y primavera. Por ello son en estos dos momentos del año cuando en más ocasiones se producen fuertes tormentas que pueden provocar grandes daños en las poblaciones afectadas.

Aunque también se han dado estos fenómenos en Cataluña, Baleares o algunas provincias andaluzas, son Murcia y la Comunidad Valenciana las que sin duda más los sufren, ya que se registran las mayores corrientes de aire cálido y húmero en esa área.

La DANA sufre un proceso de ondulación, separación, ruptura y aislamiento y tiene una circulación intensa, mientras que la gota fría se basa en el núcleo de temperatura fría de la depresión cerrada. Sin embargo, las consecuencias son las mismas: fuertes lluvias y precipitaciones.

Por culpa del aumento de la temperatura en Mediterráneo en 1,27 grados en los últimos 35 años, este fenómeno se espera que sea más intenso y frecuente, con las consecuencias que ello conllevará para las poblaciones afectadas. El incremento térmico de la superficie marina genera una mayor transferencia de calor entre las masas de aire, por lo que las precipitaciones son más fuertes.

El municipio valenciano sufrió sin duda una gran catástrofe, pero tal cantidad de agua no suele resultar lo más común. La famosa gota fría de 2019 que azotó Alicante, Valencia, Murcia y Almería, por ejemplo, rebajaba esa cifra a la mitad, y aun así fue más que suficiente como para generar estragos.