Microrrelatos

VICTORIA

Cuando un oncólogo contrae el cáncer, algo en el equilibrio de la ciencia médica se estremece. El triángulo enfermedad, paciente, sanador se convierte en un segmento único de tensiones infinitas, no hacia ambos extremos, sino hacia un cara a cara desigual en que litigar el terreno del tiempo al oponente.

La fuerza que da la experiencia aquí se alía al enemigo. Conocer el qué, el cómo y el dónde de los ataques del rival sólo sirve para adivinar el cuándo de la derrota. Por eso, tras ocho años de contienda, vuelvo definitivamente a casa orgulloso de haberle retardado su victoria.