Recopilación Microrrelatos 2018

Al girar la llave de contacto, dio un grito de alegría. Después de años de trabajo, lo había conseguido. Funcionaba a la perfección. Adiós a la gasolina, al gasoil, al metano, al propano y a todos esos carburantes que eran cada vez más escasos y ponían en peligro el planeta. Se imaginó que le darían el Nóbel, se vio en los periódicos y en las televisiones. Sí, lo había conseguido, aunque llevaba tanto tiempo encerrado en su garaje, que no se había enterado de que el barril de agua ya estaba por las nubes. Si es que todavía quedaba alguna.