Sembrando Oxígeno

Sembramos oxígeno en el municipio alicantino de Pego

Tras el incendio ocurrido en 2015 que devoró 1.700 hectáreas de superficie forestal en Pego, Sembrando Oxígeno tiñe de verde la zona calcinada en lo que será, en un futuro próximo, un frondoso bosques de 5.000 árboles autóctonos de la zona. Esta plantación ha sido posible gracias a la colaboración de Fundación Aquae e Hidraqua.

Compensar nuestra Huella de Carbono es uno de los objetivos de Fundación Aquae para contribuir a la sostenibilidad del planeta y la lucha contra el cambio climático. Con nuestro proyecto Sembrando Oxígeno plantamos árboles para recuperar masa forestal en zonas calcinadas por el fuego.

Esta iniciativa nace como respuesta al incendio ocurrido en la localidad alicantina de Pego en 2015. Allí, un año después y de la mano de Hidraqua volvemos para reforestar la superficie afectada por las llamas. Lo hacemos sembrando un total de 5.000 nuevos árboles de especies autóctonas y resilientes como son (Quercus ilex rotundifolia) y coscoja (Quercus coccifera), adecuadas para proteger el bosque frente a las acciones del cambio climático como  encinas.

Sylvestris es la empresa medioambiental responsable de la ejecución de la plantación. Esta, junto con el Ayuntamiento de Pego, han contratado a un equipo de personas desempleadas de la localidad a quienes han formado previamente para dotarles del conocimiento necesario para llevar a cabo las labores de reforestación.

El objetivo de esta acción en Pego no es solo recuperar la vegetación arbórea perdida, sino también proteger el suelo, fomentar la biodiversidad y crear masas forestales mixtas capaces de hacer frente a los efectos del cambio climático evitando posibles futuros desastres naturales. Con esta plantación se estima que se lleguen a compensar cerca de 250 toneladas de CO2 en los próximos 30 años.

Un compromiso: reducir la huella de carbono

Sembrando Oxígeno tiene doble objetivo: reforestar zonas forestales que lo necesitan y, a su vez, compensar la huella de carbono mediante la plantación de especies de árboles autóctonos de cada zona. La huella de carbono, que se mide en masa de CO2 equivalente, es la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto de un individuo, organización, evento o producto. Una vez conocido el tamaño y la huella, es posible implementar una estrategia de reducción y/o compensación de emisiones.

Los árboles cumplen una doble función: absorben CO2 y generan oxígeno. Por esta razón, la acción de reforestar es una forma de actuar en favor de la sostenibilidad del planeta. Porque plantar árboles es sembrar oxígeno. Para hacernos una idea, 22 árboles suplen la demanda de oxígeno de una persona al día.

Desde 2014, Fundación Aquae forma parte del ‘Registro de Huella de Carbono, Compensación y Proyectos de Absorción de Dióxido de Carbono’, gestionado por el MAGRAMA (Ministerio de Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente). Por este motivo, desde esta fecha informa puntualmente de sus emisiones de carbono y de los avances realizados en su plan de reducción de emisiones.