Microrrelatos
Mis veranos intentando cuidar a Gaia
Mi norte es mi centro y en mi
tierra llovía mucho hace mucho.
Hubo quejas en la infancia y
botas de agua pero nunca sequía.
Ahora mis largos veranos los
hundo en una ría gallega.
Fluía el agua pero ya no.
Me consuela que a mis baños
en las plácidas aguas marinas siguen duchas rápidas de quitar el salitre en
frío y poco más.
Comemos ensaladas y asados en
el jardín. Pocas lavadoras y cordales al aire.
Pero hubo incendios. Y
despilfarro.
Y llorar no sirve.
¡Agua bendita ¡ suplico.
Llueve…