Microrrelatos
Miradas
Nuestras miradas se cruzaron en aquel frío despacho, descubrimos que el silencio puede doler y que nuestra conciencia reacciona empíricamente a ese sentimiento.
Nos habíamos cansado de ser meros observadores de los acontecimientos, espectadores de una realidad injusta.
Era el momento de utilizar hipótesis, refutar teorías, poner en práctica investigaciones y conjeturas, teníamos las herramientas para conseguir un mundo mejor, más igualitario y justo.
Nuestras miradas volvieron a cruzarse y esta vez no había silencio en ellas.