Microrrelatos

Civilizados

Me acerqué al niño y le pregunté:

¿A dónde llevas todos los días
ese bidón de agua?

A casa – contestó- es que no
tenemos agua corriente.

Yo vengo del mundo civilizado,
allí también cargamos garrafas, aunque tenemos agua corriente.

No tendrás siempre

Siempre

No será potable

Es el alimento más controlado

Será más cara

Es 1.000 veces más barata

El niño me miró con desdén y alejándose
con su bidón encaramado en la cabeza me dijo:

Pues serán civilizados, pero muy
listos no son…