Microrrelatos

Eternidad

Vivir para siempre era una idea fascinantemente aterradora, la primera vez que escuchó de la viabilidad de tal posibilidad su piel se erizó. La transferencia de conciencia se convirtió en una realidad y en el transcurso de milenios su vida en muchas otras vidas. Entre ella y el recuerdo parecía haber tan solo un parpadeo de distancia, pero esa piel hace mucho había desaparecido, junto con los músculos que recubria y los huesos que los sostenían. Ahora, lo único que quedaba por vivir era la muerte, la fascinación se había ido y el terror había llenado el espacio vacío.