Microrrelatos

El Soldado

Se acostó esa noche con la promesa de remendar sus errores. En sus pesadillas volvía a recorrer el mismo camino, disparar el arma homicida que hizo a sus víctimas regresar por venganza cada vez. Volvía a ese escenario incontables veces sin poder conceder paz a su alma. Pensaba en un disparo para acabarlo todo. Sus hijos nunca sabrían, su esposa nunca reconocería al hombre que mañana abriría la puerta. No sería un héroe, solo un asesino más de una guerra sin sentido. Volvería otra vez a la sociedad que, esclava de sus vicios, era dueña de un mundo en extinción.