Microrrelatos

Densidad de palabras

La miraba y le dolía el alma. Había nacido así y hasta ahora nadie supo decirle el por qué. Buscó médicos,terapias alternativas,rezó a su Dios y a los ajenos. Pero nada,ella continuaba sumida en el silencio más impenetrable. Ese que aisla y protege, que lastima al amor y evita abrazos,ese que se puebla de dudas y culpas.

Cada noche, armaba y desarmaba prototipos, convencido de que en algún momento podría contar las palabras pensadas.

¡No podía ser su imaginación! Ahí estaban, dibujadas. Sobre el papel se repetía «papá» mientras su niña sonreía.