Microrrelatos

Los lectores no lloran

Un hidrozoo de medio centímetro, la Turritopsis nutricula. Los humanos del
futuro modificaron el proceso en sus diminutos cuerpos, como recitar un poema y
que las estrellas implosionen. Hete ahí, en una cápsula, rezando para que el
Arca necesite lectores. Solo, en la inmensidad, sin nadie a quien abrazar.
Luego, un androide con cara de tostadora te conduce a la inmortalidad: una
burbuja sideral en la que no cabe tu sombra. Y lees informes del pasado. Y no
lloras porque no tienes lágrimas.