Microrrelatos

En serio

          —¿En serio?

     La baba de su compañero bailaba sobre sus labios. Le había revelado la verdad de lo que estaba viendo. La realidad de su Obra clandestina.

     Él  asintió sonriente y nervioso.

     La mente del asombrado compañero no dejaba de atribuir la lógica a teorías imposibles. Había ido al sótano de su amigo para ver una extraña película fantástica… y ahora le acababa de decir que no era una película.

     El creador de la Obra descorrió la cortina negra.

     La baba del científico finalmente se cayó.

     Sobre un sillón, yacía un hombre dormido con cables que iban de su cabeza… al monitor.