Microrrelatos

Martes, trece

Martes,trece. Se respiraba un aire turbio, helado. Tomás despertó aquella mañana envuelto en un cúmulo de sensaciones. Desayunaba acompañado de un documental en el que escuchó (de refilón) aquella famosa cita de Einstein acerca de la tecnología. No tardó en partir hacia su oficina. Adentrándose en ella, recordó con  sonrisa descreída aquella cita. Ante él, una máquina de escalofriante porte. Junto a ella, una nota. «Tu trabajo en esta empresa ha prescrito. Ten, cobra tu  finiquito». Su jefe poeta. Su trabajo frustrado.Por una máquina.Impotencia. Desdichada tecnología.