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Innovación, tecnología y gobernanza colaborativa: las claves contra la escasez del agua

30 de Enero de 2022
La gobernanza colaborativa es clave para hacer frente a los desafíos del agua. Así lo expresa Amelia Pérez Zabaleta, directora de la Cátedra Aquae de Economía del Agua.
España es uno de los países de Europa más vulnerables al cambio climático. Según la Estrategia España 2050, el nuestro será uno de los países europeos que verá más reducida su disponibilidad de agua dulce en las próximas décadas debido a los efectos del cambio climático.

Se estima que en 2050 un 57% de la población de nuestro país vivirá en zonas en estrés hídrico. Esta elevada presión sobre el agua dulce, agravada por los efectos de la crisis climática, está forzando un cambio en la concepción del recurso hídrico, así como en los modelos existentes para gestionarlo, en línea con la economía circular, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030.

Reforzar alianzas y apostar por la gobernanza colaborativa

En este contexto, para impulsar una transición hídrica que permita adaptarnos a estos retos que plantean el cambio climático y la escasez de agua, además de invertir en innovación y tecnología, es esencial reforzar las alianzas y la gobernanza colaborativa. Así lo establece el ODS 17 –  “alianzas para los objetivos” – , columna vertebral de la Agenda 2030, en el que se propone crear pactos mundiales y fomentar la colaboración público-privada para solucionar los problemas relacionados con el desarrollo sostenible en sus tres dimensiones: ambiental, económica y social.

En esta misma línea, la evolución de las necesidades de una gestión integrada del agua obliga a un enfoque participativo que involucre a los usuarios, a los planificadores y a los responsables políticos de todos los ámbitos. Una de las respuestas al reto que supone buscar soluciones para afrontar con resiliencia la transición hídrica se encuentra en la colaboración entre la academia y la empresa.

El binomio Universidad-Empresa genera sinergias que permiten avances en la formación, la investigación y la divulgación en ámbitos tan singulares y sensibles como el agua en todas sus facetas: como recurso escaso que es, por el impacto del cambio climático, la economía circular, la gestión, los sectores económicos, o la seguridad y la paz, y que estos avances sean transferidos a la sociedad.

El binomio Universidad-Empresa

La Universidad juega un papel fundamental, no solo en lo que se refiere al ámbito de la formación, la concienciación, la educación o la sensibilización social sobre los desafíos a los que nos enfrentamos, sino, como no puede ser de otra manera, en el ámbito de la investigación.

De hecho, la investigación está abanderando este proceso de transformación ambiental, económica y social, con la búsqueda de soluciones realistas a los problemas planteados basadas en el conocimiento y en la evidencia científica. En este sentido, debe ser un ejemplo de gestión y sobre todo un ejemplo de cooperación con otros agentes como empresas, organismos públicos, etc. Esta colaboración permite la transversalidad en el conocimiento y que la academia se oriente en la dirección correcta.

Un ejemplo de alianza entre universidad y empresa es la Cátedra Aquae de Economía del Agua.

Por su parte, las empresas juegan un rol clave y son los auténticos promotores del cambio. No solo apuestan por la innovación y proveen de recursos a las universidades financiando sus proyectos, sino que aterrizan los avances científicos y tecnológicos para garantizar su implementación asequible en el mercado. Además, es la sociedad la que pide a las empresas que incorporen dentro de su Responsabilidad Social Corporativa el compromiso de lucha contra el cambio climático y las desigualdades protegiendo a los más vulnerables.

Ejemplo de alianzas son las cátedras universidad-empresa, que establecen una colaboración estratégica entre la Universidad y una empresa o entidad, como es el caso de la Cátedra Aquae de Economía del Agua, creada en 2013 por la UNED y la Fundación AQUAE.

La Cátedra Aquae siempre ha apostado por una investigación integradora en la que se pone en valor la unión de la experiencia práctica del sector privado y la experiencia investigadora y docente de la Universidad. Es este trabajo conjunto el que ofrece resultados. Con este mismo espíritu colaborativo de compartir experiencias y conocimientos para ponerlo al servicio de esas respuestas que nos demanda la sociedad surge la Red de Cátedras del Agua, una iniciativa del grupo Agbar.

Esta red se crea para coordinar los esfuerzos de once cátedras universidad-empresa de diferentes disciplinas y territorios de toda España, entre las que se encuentra la Cátedra Aquae, impulsadas por empresas operadoras de agua del grupo Agbar, que promueven la investigación, la formación y la divulgación en el campo de la gestión integral de los recursos hídricos y la sostenibilidad ambiental desde una perspectiva multidisciplinar, imprescindible para abordar los retos que afronta la gestión del agua. Su principal objetivo es contribuir a una transición ecológica justa que permita promover soluciones innovadoras para la mitigación y la adaptación al cambio climático, atendiendo a las personas en situación de vulnerabilidad.

La fuerza de esta red se asienta en la interconexión y la transferencia de conocimiento y talento de las Cátedras integradas en ella, por lo que, más allá de los avances y herramientas que se logren con estas fórmulas colaborativas, la Red de Cátedras se puede convertir en un catalizador de talento en torno al agua y su mejor gestión. Colaborar, intercambiar y actuar juntos estableciendo alianzas, en línea con el ODS 17, es una prioridad para que el cambio que demanda nuestra sociedad sea una realidad.


*La publicación original de esta tribuna de Amelia Pérez Zabaleta, directora de la Cátedra Aquae de Economía del Agua – impulsada por la Fundación Aquae y la UNED –  ha sido publicada en El Economista. Puedes acceder al artículo, aquí.  

ACERCA DEL AUTOR

Amelia Pérez Zabaleta
Doctora en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) y profesora Titular en el departamento de Economía Aplicada. Dirige la Cátedra Aquae de Economía del Agua.