Microrrelatos

La tetera de Rásel

-«Se pronuncia Rásel».

Se quedó impávido, ojeando la pantalla del ordenador de la biblioteca, mientras algunos chistaban el atrevimiento de su nieto a puntualizar sus susurros. Le pareció vertiginoso que un tal Bertrand Russell hubiera especulado con una idea semejante hace tanto tiempo. Imaginó que en alguna conversación de bar podría haberse quedado con todo el mundo, de haberlo sabido antes. Pero sin exagerar. Seguramente, pensó, su inteligencia le hubiera maravillado más a él que a los demás.