Microrrelatos

Juegos de guerra

El sudor recorre su frente, se siente extenuado. Es el tercer día de avance sobre la región de las facciones enemigas. -Nadie es inocente aquí -piensa-debo avanzar con cuidado. El capitán lo desafía a llegar a la próxima aldea por cien monedas extra, y le recuerda que varios compañeros suyos ya han tenido éxito alcanzando la meta. El arma, diseñada para ser liviana y maleable, se torna pesada como una roca y dispara accidentalmente contra una nave de turismo. Entonces Benito decide dejar el juego en pausa, arroja el mando de control a un lado y corre a buscar un refresco. En la tecno burbuja catódica dispuesta en el living, se puede leer «Explota avión comercial. Ampliaremos».