Aquae y UNICEF continuarán trabajando en la Amazonía para controlar la pandemia

El 89% de la población que vive en la región amazónica de Perú no dispone de agua potable lo que complica mantener las medidas higiénicas recomendadas para evitar contagios de coronavirus. Es en estas zonas de especial vulnerabilidad donde Aquae y UNICEF han desarrollado durante los últimos seis años este importante proyecto que busca mejorar el acceso a los servicios de agua y saneamiento en estas regiones. Sin embargo, debido a la actual coyuntura, tanto Aquae como UNICEF han entendido que, es necesario continuar garantizando las condiciones de higiene adecuadas que eviten y frenen los contagios por coronavirus en la amazonía.

Hasta la fecha se han implementado más de 420 baños ecológicos secos que benefician directamente a más de 700 familias de entornos rurales en las regiones amazónicas Loreto y Ucayali. Estas soluciones unifamiliares incluyen un lavadero de manos y un doble depósito que permite transformar los desechos en compost utilizable para el cultivo.

Muchos de estos baños se construyen a una altura mínima aproximada de un metro para asegurar su resistencia durante la época de lluvias y de crecida de los ríos, ya que en muchas de estas zonas llueve durante nueve meses al año.

En la última fase de este proyecto, Fundación Aquae y UNICEF España han conseguido, además, influir en las políticas de agua y saneamiento de Perú, incorporando su modelo de trabajo a la normativa de saneamiento rural del país.  

A través de un conjunto de guías, ideadas para el contexto amazónico, el objetivo es desarrollar una normativa para las Áreas Técnicas Municipales y las Unidades de Gestión Municipal. Este trabajo incorporará reglamentos, estatutos y criterios para que en las organizaciones comunales se presten servicios de saneamiento, incluyendo sistemas de agua y saneamiento familiar. 

El impacto del coronavirus en el Amazonas y en Perú

Desde que se detectó el primer caso de coronavirus en el mes de marzo, Perú ya suma 305.000 positivos y más de 10.700 fallecidos por la Covid-19 convirtiéndose en el décimo país más afectado por el coronavirus del mundo y el tercero más golpeado en América Latina. No obstante, el estado de emergencia, vigente desde hace 106 días, se ha ampliado hasta el 31 de este mes. 

El Amazonas, el llamado pulmón verde del mundo, encendió las alarmas de las autoridades de varios países, como Brasil, Colombia y Perú. El coronavirus es uno de los grandes problemas a los que debe enfrentarse el continente que acoge este vasto y selvático territorio. Su población, mayoritariamente indígena y con una red hospitalaria deficiente, ha sufrido en el pasado otras epidemias, pero ahora se enfrentan a una situación que puede diezmar considerablemente su población y su salud. De hecho, se ha reclamado a la OMS un fondo específico de emergencia para su protección. 

La ausencia de carreteras, las dificultades del transporte fluvial, la falta de respiradores y unas instalaciones médicas insuficientes hacen de la Amazonía peruana una región mucho más vulnerable que el resto del país. 

Unicef y Aquae, comprometidos con la población indígena

A través del proyecto de Fundación Aquae y UNICEF para la Amazonía se llevan a cabo diversas acciones en las zonas en las que, desde hace años, se trabaja para llevar agua y saneamiento a las poblaciones de Loreto y Ucayali, dos regiones que han sido duramente golpeadas por el coronavirus COVID-19. 

Además, desde el proyecto “Agua para la Amazonía peruana” se ofrece asistencia técnica a los ministerios de Cultura, Salud y Vivienda sobre cómo atender de la mejor manera a estas poblaciones. Gracias a ello, se han desarrollado nuevas normativas a modo de guías de cómo adaptar los protocolos y los procedimientos más adecuados para los habitantes, y se ha convertido en un referente en Perú.