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Javier Creus, sobre la economía colaborativa como motor de cambio

Descubre en esta entrevista completa con Javier Creus, experto en economía colaborativa, en qué consiste este concepto revolucionario. Se trata de una de las 10 ideas que, según la revista Time, más va a cambiar el mundo. Si quieres entender en qué consiste realmente este nuevo modelo económico que está arrasando, no te pierdas este artículo.

La economía colaborativa supone una gran oportunidad tanto para consumidores como para emprendedores. En este sentido, las plataformas colaborativas que surgen de este modelo económico pueden reportar grandes beneficios en torno a la creación de empleo y al crecimiento económico. Javier Creus comparte en esta entrevista para Fundación Aquae su visión sobre el poder disruptivo de la economía colaborativa y nos muestra algunas de sus ventajas y características.

Basados en la innovación, los nuevos modelos de negocio tienen un gran potencial para contribuir a la competitividad y el crecimiento de las empresas y los mercados. Sin embargo, la economía colaborativa ha causado una cierta agitación social ya que algunos sectores de la sociedad consideran que a menudo este modelo conduce a prácticas empresariales no éticas o irresponsables.

La economía colaborativa presenta, además, un elemento fundamental que es su carácter disruptivo. En este sentido, la entrada al mercado de plataformas algunas plataformas en el sector turístico ha supuesto una reestructuración masiva de la forma de viajar. Esto ha supuesto graves pérdidas para algunas empresas en las industrias hotelera y de transporte. Pero para otras ha supuesto una oportunidad para reinventarse y participar de este nuevo modelo económico.

Características de la economía colaborativa

Desde su aparición, el concepto de economía colaborativa ha evolucionado mucho ya que hay una gran variedad y diversidad de modelos de negocio colaborativos. Por ello resulta cada vez más difícil aportar una definición única e inequívoca de qué es la economía colaborativa. Pero la podríamos definir como un concepto que engloba actividades que implican un intercambio de bienes o servicios entre particulares a cambio de una compensación pactada entre ambos.

Por lo tanto, la economía colaborativa hace mención a una gran variedad de plataformas en las que se ofertan productos o servicios difíciles de etiquetar. A pesar de la generalidad de la definición, existe un elemento muy importante común a todas las iniciativas que surgen en este marco: todas ellas se basan en la explotación de bienes infrautilizados.

A pesar de su efecto disruptivo sobre algunas industrias, las plataformas colaborativas suponen ganancias multimillonarias para la economía europea. Además, se trata de un modelo ecosistémico del que todos pueden participar. En algunos casos, incluso dejar una huella positiva. En este sentido, la economía colaborativa pretende precisamente fomentar la colaboración y la optimización del uso de recursos. Por lo que estas plataformas fomentan un impacto medioambiental positivo.

Una nueva forma de crecimiento

La crisis financiera de 2008 forzó a la sociedad a reconsiderar sus actitudes hacia la adquisición de bienes. ¿Es necesario realmente poseer un objeto? Con la llegada de la economía colaborativa, la propiedad ha dejado de ser una muestra de independencia. De hecho, una sociedad que posee menos y comparte más puede entenderse como una sociedad más empoderada.

Como menciona Javier Creus, una de las características de la economía colaborativa es su gran capacidad de transformar. Los sectores que son más permeables al cambio han sido los primeros en adaptar sus modelos de negocio a nuevos formatos basados en la colaboración. A continuación te mostramos algunos de los sectores que más se han hecho eco de este nuevo modelo económico:

  • Alojamiento. A través de las plataformas colaborativas, la gente alquila sus hogares. Algunos ejemplos de estas empresas son Airbnb, HomeAway o HouseTrip.
  • Transporte. El transport sharing ha venido para quedarse. Se trata de plataformas que facilitan la contratación de vehículos como coches, motos y bicicletas. Algunos ejemplos son: Car2go o Movo. También están las plataformas que sirven para encontrar compañero de viaje para un trayecto por carretera. ¿No has oído hablar de BlaBlaCar todavía?
  • Finanzas. Las plataformas de crowdfunding como Kickstarter o IndieGogo permiten encontrar financiación a nuevos proyectos. De esta manera, desaparece el banco como la única opción para conseguir financiación para un proyecto.