¿Qué es el ozono troposférico?

El ozono (O3) es una molécula compuesta por tres átomos de oxígeno. Se forma cuando la radiación ultravioleta disocia las moléculas de oxígeno molecular (O2) en dos átomos, los cuales reaccionan con otra molécula de O2 formándose el ozono.

Es un gas que afecta de forma positiva o negativa a los seres vivos según donde se encuentre. En las capas altas de la atmósfera, actúa como un filtro para la radiación solar ultravioleta potencial responsable de causar daños en el ADN y aumentar el riesgo de cáncer de piel. Este filtro es conocido como capa de ozono y está situado en la estratosfera, desde los 10 a los 50 kilómetros de altitud.

También se puede encontrar ozono al nivel suelo, en la franja habitable que conocemos como troposfera, por debajo de los 10 kilómetros de altitud. El ozono en estas capas bajas es un gas irritante, molesto para las personas y dañino para los vegetales.  

Cómo se genera el ozono troposférico

El ozono troposférico se puede formar debido a las actividades humanas, como la quema de combustibles fósiles, y también por fenómenos naturales, como los incendios forestales.

Se genera ozono troposférico cuando los precursores químicos, como los óxidos de nitrógeno (NOₓ) y los compuestos orgánicos volátiles (COV), reaccionan en presencia de luz solar.   En ciudades grandes, con mucho tráfico rodado y de clima soleado, este efecto es más notorio y provoca alertas que las autoridades transmiten a la población cuando se genera una alta concentración de gas en la superficie. A menudo los vientos transportan el ozono troposférico generado en las ciudades hacia campos y montañas situados en la periferia urbana.

Qué problemas causa el ozono troposférico

Los problemas que causa el ozono troposférico son variados:

• Irritación respiratoria: el ozono troposférico es muy irritante para los pulmones y puede causar problemas respiratorios, especialmente en niños, ancianos y personas con afecciones respiratorias preexistentes.
• Problemas cardiovasculares: se ha vinculado la exposición al ozono con un mayor riesgo de problemas cardiovasculares, como ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
• Daño a la vegetación: El ozono troposférico daña las plantas al interferir con la fotosíntesis y reducir la producción de cultivos.

Para rebajar los niveles de ozono troposférico, se requiere reducir las emisiones de compuestos precursores como los óxidos de nitrógeno (NOₓ)  y los compuestos orgánicos volátiles (COV), para lo cual habría que emplear combustibles limpios que sustituyan a los hidrocarburos.