Microrrelatos

Memento homo

La Historia no es una ciencia, exclamó el académico Neufruliet: «mi abuela contaba historias, mi jardinero cuenta historias. Mi
perro ladra historias de sus huesos remordidos.»

Está bien, dijo su discípulo Abielón: Por eso nuestra memoria tiene la inconsistencia de los sentimientos extraviados. ¿Sabe usted,
maestro, cómo es que llora mi oxígeno, mi carbono?

No lo sé, hijo. Pero busca la verdad por el camino de la química. Sólo así podremos seguir creyendo todas las mentiras humanas.